Arcángel Jeremiel y Escorpio son un par perfecto, ya que Escorpio es profundo y a veces oscuro, no hay reparos en enfrentar las sombras y misterios de la vida, por eso se sumergen sin miedo en áreas que el común de las personas no se atreve a reconocer
Dr. Moisés Matamoros Muñoz
Mar – Jeshván es el octavo mes del calendario lunar, es regido por el planeta Marte, junto con Aries / mes de Nisán, esto impacta que la confrontación le incomoda o molesta, apenas siente el peligro se prepara y está listo para cualquier combate y cuando ataca va directo al corazón. En este mes el juicio puede ser cruel, duro e insensible. Puede quemar como el fuego, pero con misericordia, el juicio tiene un gran potencial de sanación.
Cuando conocemos a un escorpio sabemos que estamos ante alguien que debe tenerse en cuenta ya que irradian un poderoso magnetismo. Puede haber atracción pero también incomodidad. Los escorpio son fuertes tanto espiritual como físicamente y son dueños de una fuerza de voluntad que les permite alcanzar cualquier objetivo que se propongan. Hay mucha independencia en ellos y esto provoca no sentirse cómodos si no tienen el control de la situación en sus manos; su determinación solo rivaliza con su impaciencia.
La región del cuerpo relacionada con Escorpio es la de los órganos sexuales, esto implica un poder de seducción muy poderoso, pero puede volverse muy destructivo en el uso del poder sexual. Los escorpio aman las historias melodramáticas y encuentran gratificación en las emociones extremas. Aunque ansían el amor y adoran los grandes gestos, no les gusta mostrar su necesidad de amor. Sus celos son legendarios, no soportan que alguien tenga algo que ellos quieren. Su envidia es peligrosa porque suele expresarse sutilmente.
Los escorpio no son muy lógicos, sino altamente intuitivos y pueden detectar los sentimientos más profundos de los demás. Identifican las debilidades de los demás y no vacilan en revelarlas. Suelen ser profundamente generosos y dadivosos, comparten en el sentido estricto de la palabra. Por su anhelo desesperante del control son presa de sus emociones y pasan de un sentimiento a otro y pueden pasar en un instante del amor ciego al odio feroz. Usualmente culpan a otros de sus angustias y descargan sus ansiedades en las personas que más los aman, y nunca olvidan un desaire.
Escorpio es un signo de agua, pero en Kabbalah está estrechamente relacionado con el fuego, son una paradoja viviente. El fuego hace que los escorpio sean impulsivos, tengan poca paciencia y se nieguen a sí mismos el tiempo suficiente para pensar antes de actuar. Además se vuelven insensibles a las necesidades de los demás, por eso deben atenuar su fuego con agua; el agua simboliza la generosidad y la misericordia, mientras que el fuego simboliza el juicio. Cuando los escorpio permiten que el aspecto del agua de su carácter emerja, pueden transformar su naturaleza y ascender a niveles más altos de conciencia.
Es por eso que el Arcángel Jeremiel se asocia a la energía de Escorpio, como su custodio, guía, maestro. La creencia popular es que uno revisa su vida al morir y escribe su vida antes de nacer o dar a luz. El Arcángel Jeremiel ayuda a uno con esta revisión, influencias kármicas, y escribiendo su nueva vida. La tarea del Arcángel Jeremiel apoya y guía a las almas que acaban de morir mientras examinan la forma en que sus acciones afectaron a otras personas, y que lo aprendieron durante ese periodo de vida. Sin embargo no hay que esperar hasta el momento de cruzar el umbral de la vida para analizar la propia vida.
Arcángel Jeremiel y Escorpio son un par perfecto, ya que Escorpio es profundo y a veces oscuro, no hay reparos en enfrentar las sombras y misterios de la vida, por eso se sumergen sin miedo en áreas que el común de las personas no se atreve a reconocer. El mes de Escorpio nos puede ayudar a sumergirnos en los aspectos más oscuros de nuestra vida, nos anima a renovarnos.
Arcángel Jeremiel se especializa en entender las visiones espirituales y conducir una revisión de vida para que podamos hacer ajustes concernientes a cómo deseamos vivir. El Arcángel Jeremiel nos recuerda que la vida tiene aspectos de luz y de oscuridad, lo más importante es tener un panorama general de cómo va la vida. Jeremiel nos ayuda a mirar con claridad nuestra vida actual para que podamos asumir responsabilidad por elegir lo mejor, si es necesario. Arcángel Jeremiel ayudará a llevar a cabo una revisión desde el perdón y la misericordia para asumir el camino del amor y servicio generoso desde el yo superior.
Arcángel Jeremiel es un gran ayudante a deshacerse de las capas de la cebolla de Escorpio que impiden llegar al corazón de la luz, de esto trata la revisión de vida, de experimentar la oscuridad más profunda para apreciar, valorar y desear la Luz. Entonces la revisión de vida no suaviza el sentir, sino se fortalece el aprendizaje, Arcángel Jeremiel ayudará a enfrentar las circunstancias desagradables para sanar, crecer y evolucionar. Es un símbolo de esperanza y motivación en las almas fragmentadas. Su presencia es importante para aquellos que buscan luz en sus vidas aburridas. Por su bendición, podemos encontrar conversión de acuerdo a la voluntad de Dios.
Si en esta vida tu signo zodiacal es Escorpio significa que en tu vida pasada fuiste Tauro, firmemente aferrado a determinada manera de ver el mundo, eras terco, lento y extremadamente reacio al cambio. Susceptible a placeres corporales y vanidoso consumado, enamorado de la belleza y la naturaleza, extremadamente posesivo y preferías los bienes materiales a los espirituales. Temeroso de la pérdida de tu comodidad estuviste alejado de experiencias significativas. Tu vida fue rutinaria y vacía. Amarrado por tu terquedad no escuchaste ni aprendiste de los demás, pero en esta ocasión tienes lo necesario para lograr tu transformación más genuina.
Arcángel Jeremiel te ayudará a abandonar la rigidez de las reglas que marcaron tu vida anterior y permitirte actuar con espontaneidad, saboreando la libertad de acción. De esta manera tomarás conciencia de las ilusiones que pesaron sobre tu espíritu, confiando en que la Luz te protegerá. De esta manera te sabrás digno de respeto y amor.
Habrá la asistencia necesaria y suficiente por parte de Arcángel Jeremiel, pues puede resultar una corrección difícil incluso puede que multiplique algunas pérdidas dolorosas. Al principio tu comodidad y tu sentido de la seguridad pueden verse amenazados. Al abandonar tu temor a la pérdida podrás incrementar tu capacidad de recibir tanto espiritual como materialmente.
Este mes viene lleno de retos, nuestros rasgos negativos y cualidades egocéntricas más profundamente arraigadas se elevan al primer plano. Resiste el imperioso impulso de reaccionar. Elévate por encima de la fuerza primitiva del impulso y descubre lo que verdaderamente necesitas corregir en el curso de tu desarrollo espiritual.
Dice el Evangelio de San Marcos en su capítulo 4, versículo 22: “Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido que no haya de salir a luz”. Pudiera ser esta la expresión más completa y significativa de lo que representa la ayuda y energía de Arcángel Jeremiel en este mes de Escorpio y siempre: ayudarnos a que la Luz sea revelada en medio de toda oscuridad. Si estás atravesando un momento de muchas sombras, confusiones, pérdidas o conflictos, es entonces tu gran oportunidad de unirte en cuerpo y alma a esta frecuencia, y solicitar la ayuda de Arcángel Jeremiel, para que encuentres el sentido de esta situación y puedas encontrar lo que en el mundo espiritual se conoce como “bendición escondida”.
El Diluvio ocurrió durante el mes de Escorpio. La generación de Noé era corrupta y a Dios no le quedó otra opción más que destruirla completamente con el diluvio. Solo Noé, su familia y un par de todas las criaturas de la Tierra se mantuvieron vivas debido a la protección del Arca. Escorpio tiende a ser un mes de energía negativa y uno de los pocos meses en los que no hay festividades. El mes de Escorpio es un buen momento para enfocarse en los patrones negativos, los sentimientos negativos que guardamos, y los resentimientos que puede que tengamos.
