Al comprar romeritos se fortalece el campo de la ciudad y la economía de este poblado que forma parte también del Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad
Revista Protocolo
Ciudad de México, 31 de marzo de 2021.— “Afortunadamente ya tenemos lista la producción de romeritos para Semana Santa, ha hecho buen clima y esto nos permitió tener buena siembra para empezar a comercializar. Ahora solo pedimos a la ciudadanía que venga al pueblo de San Andrés Mixquic, que nos ayude a consumir estos productos”, asegura Manuel Jiménez Reséndiz, productor de San Andrés Mixquic, Ciudad de México.
Jiménez Reséndiz es uno de los productores agrícolas que han dedicado su vida al campo, a conservar la tradición de sembrar romeritos en esta demarcación ya que en Xochimilco son pocos. “Aproximadamente tengo como 300 bultos de 40 kilos que, en total, son como unas 12 toneladas, que se podrán encontrar para su venta en la Central de Abasto y por supuesto aquí en el ejido de San Andrés Mixquic ya que, aunque no sea conmigo, aquí hay muchos compañeros que están cortando y hasta la gente puede escoger el mejor precio”, mencionó.
La Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr), de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la CDMX, informa que para este año se cultivaron 80 hectáreas de romeritos, que están listos para su consumo durante la Cuaresma.
San Andrés Mixquic es uno de los principales productores de este quelite en el país y su comercialización representa la fuente más importante de ingresos.
“Es de las verduras lo que más nos reditúa, en ninguna otra parte hay producción de romeritos y de su comercialización es que podemos capitalizarnos para nuestra siguiente siembra. Hay veces que se pone muy barato y en ocasiones que ni siquiera se vende, en Navidad sí se vendió bastantito, ojalá en esta temporada pase lo mismo”, expresa el productor.
Manuel tiene 60 años de edad y aproximadamente 35 años como productor: “El amor por preservar la tierra, por no permitir que crezca la mancha urbana es lo que nos mueve, sembrar arbolitos como el ahuejote es lo que da oxígeno y así contribuimos a que esto suceda para bien de la ciudad.”
En el segundo año de contingencia sanitaria por covid-19, el Gobierno de la CDMX no ha detenido los apoyos dirigidos al suelo de conservación por medio de la Corenadr, la cual tiene un presupuesto histórico de mil millones de pesos para impulsar la producción agrícola y pecuaria sustentable; la conservación y preservación de los ecosistemas y agroecosistemas.
Jiménez Reséndiz además de los romeritos siembra brócoli, apio, lechuga y verdolaga, que ya también es la época y algunas veces acelgas, por este motivo lanza la petición a los capitalinos: “Es un buen momento para decirle a la ciudadanía que refuerce sus defensas, consuma verdura y fruta, lo mejor es el brócoli ya que los médicos y los nutriólogos aseguran que es bastante bueno.”
Al comprar romerito se fortalece el campo de la ciudad y la economía de este poblado que forma parte también del Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad.
