Se llevó a cabo el Primer Foro Internacional de Negocios en Biotecnología 2009 en Irapuato, Guanajuato
ProMéxico impulsa a empresas mexicanas para aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado de la biotecnología industrial, que en los próximos años alcanzará un potencial de mil millones de dólares. Por ello, en coordinación con el gobierno de Guanajuato, el Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional y la Universidad de Guanajuato, organizó la Sexta Reunión Internacional de Investigación en Productos Naturales y el Primer Foro Internacional de Negocios en Biotecnología, que se llevó a cabo en el Inforum de la Ciudad de Irapuato, Guanajuato.
El encuentro contó con la participación de 34 expertos en la materia, procedentes de cinco países, y más de 32 instituciones de investigación y educación superior de México. Durante las sesiones se puso de manifiesto la relevancia que adquiere este sector para los productores nacionales de atraer inversionistas y para los investigadores de conseguir financiamiento.
El foro permitió además que se exploraran áreas de oportunidades en bionegocios, financiamiento y capital de riesgo para la generación de empresas de base tecnológica, la creación de bioclusters en México y el acercamiento de biotecnologías para empresarios no biotecnológicos.
En este marco fueron presentados diversos proyectos que se encuentran listos para su puesta en marcha, como por ejemplo: bioplásticos, quitosán, biorremediación, construcción de plantas para biorefinación, el desarrollo del parque biotecnológico AgroBiopolo que se ubica en Irapuato, entre otros. Asimismo, se dieron a conocer los avances logrados en México para la obtención de extractos vegetales de alto valor.
México cuenta con casi dos millones de kilómetros cuadrados de superficie, dispone de una amplia variedad de climas y suelos y de recursos genéticos. Esto coloca al país como un lugar inmejorable para el desarrollo de proyectos de inversión en biotecnología, principalmente en los campos de la agricultura, pecuario, forestal, pesquero y acuícola.
El país no sólo tiene activos rurales disponibles, sino que también cuenta con el capital intelectual suficiente para desarrollar y poner en marcha proyectos de inversión en proyectos de agrobiotecnología. En el Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuenta con algunos de los más prestigiados investigadores del mundo en esta materia, tanto por sus líneas de investigación y desarrollo tecnológico como por sus programas de formación de maestros en ciencias y doctorados.
México es uno de los países con mayor diversidad de flora y fauna del mundo. Pero no sólo destaca por su biodiversidad sino porque se encuentra entre los grandes productores de frutas y hortalizas de invierno, además de que se distingue por ser una de las naciones más pujantes en materia de exportaciones agroalimentarias y pesqueras.
Durante 2008, el valor de las exportaciones agroalimentarias mexicanas alcanzó casi los 18 mil millones de dólares. Pero si a estas cifras se suman las exportaciones de productos forestales maderables, celulosa y papel, el monto supera los 20 mil millones de dólares de acuerdo con el World Trade Atlas, 2009.
Dentro de los trabajos que realiza ProMéxico, se han identificado áreas de oportunidad en: Genómica vegetal, es decir, trabajos sobre resistencia a sequía, a plagas y enfermedades, genotipos de alto rendimiento, así como su propagación in vitro; genómica animal, al trabajar con individuos de alto índice de conversión de biomasa a proteína; trabajos sobre la obtención de sueros y precursores de vacunas.
Otra área de oportunidad la representa el aprovechamiento de subproductos de origen animal para obtener cultivos que permiten desarrollar agroquímicos biológicos naturales; cultivos para obtener materiales de construcción rural y aislantes; así como cultivos para obtener productos para la industria de cosméticos e higiene además de colorantes naturales, ceras, lubricantes naturales, productos para recubrimientos y barnices naturales; nutracéuticos, suplementos alimenticios; celulosa, resinas naturales, además de adhesivos naturales.
Revista Protocolo
