La Universidad de Utah dio a conocer el 8 de marzo el estudio denominado El Impacto Económico de las Relaciones México-Utah. Este documento, el primero publicado sobre el impacto de las relaciones entre México y dicha entidad, se suma a la estrategia desarrollada por la Secretaría de Relaciones Exteriores para difundir los beneficios económicos reales que aportan los mexicanos a Estados Unidos y así propiciar un debate objetivo del fenómeno migratorio en aquel país.
El estudio analiza cinco vínculos económicos entre Utah y México: la población mexicana residente en el estado, las relaciones comerciales y financieras, el turismo y el acceso de estudiantes indocumentados a las universidades públicas.
El documento destaca que los mexicanos en Utah son dueños de 1834 negocios, lo que significa una aportación a la economía del estado de 227 millones de dólares anuales. Los propietarios de esos negocios, que en su mayoría corresponden al sector de servicios, pagaron aproximadamente 85 millones en sueldos y emplearon a 3214 personas. Su capacidad de compra excede los mil millones de dólares y contribuyen al fisco con el pago de impuestos en aproximadamente 67 millones de dólares anualmente. También son dueños de propiedades valuadas en 984 millones de dólares.
Durante la ceremonia de presentación, el Cónsul de México en Salt Lake City, Salvador Jiménez, destacó la objetividad y la confiabilidad de este estudio, y señaló que permitirá valorar en su verdadera dimensión las aportaciones que hacen los mexicanos a Utah, y a la vez dará mejores bases para impulsar la relación de México con dicho estado.
La publicación fue presentada en el Instituto Hinckley de Política de la Universidad de Utah. El estudio fue financiando por el Zions Bank y por el propio Instituto Hinckley.
Revista Protocolo
