El embajador de Alemania en México, Eberhard Kölsch, y su esposa Elke recibieron el pasado 14 de octubre al alcalde gobernador de su ciudad capital, Klaus Wowereit, quien vino a nuestro país en plan de promoción de las relaciones bilaterales culturales.
El propósito principal de la visita de Wowereit fue asistir a la inauguración del 31 Festival Cervantino en Guanajuato, ceremonia a la cual el país germano fue invitado de honor, pero en cumplimiento con un acuerdo de hermandad y cooperación que fue firmado entre la ciudad de México y Berlín en 1993, también aprovechó para inaugurar una semana de teatro alemán en el Distrito Federal.
De la misma manera, el alcalde berlinés se reunió con su homólogo capitalino Andrés Manuel López Obrador, con quien intercambió puntos de vista sobre una amplia gama de temas, incluyendo el desarrollo urbano, la protección al medio ambiente, el transporte, el agua, el tratamiento de desechos, la cultura y las artes.
Cabe mencionar que el funcionario alemán quedó sumamente impresionado por la agilidad política de su contraparte mexicano, pues después del encuentro en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, afirmó que el jefe de Gobierno del Distrito Federal “tiene posibilidades de llegar a la presidencia gracias a su gran trabajo”.
Posteriormente, en una charla informal con un diplomático europeo dentro de las instalaciones de la residencia oficial, agregó que “es obvio que López Obrador tiene hambre de ser presidente”.
