Cultura

Desiertos. Paisaje exterior, estado interior en el Centro Cultural Los Talleres

Coreografía y danza para explicar la supervivencia ante condiciones extremas internas y externas

Desiertos. Paisaje exterior, estado interior en el Centro Cultural Los TalleresUna reflexión de la supervivencia en un clima extremo, la forma en que se adaptan la flora y fauna, y cómo los seres humanos podemos sentirnos pequeños ante la inmensidad del universo, son aspectos que aborda la propuesta interdisciplinaria Desiertos. Paisaje exterior, estado interior, que se presentó recientemente en el Centro Cultural Los Talleres.

Se trata de cinco historias: Desierto, el paisaje; La televisión; El bar; La espina y Espacio exterior, en las que se combinan la danza, el arte sonoro, el teatro y las artes plásticas, generando así múltiples metáforas.

Bajo la dirección de Lía Viridiana Domínguez, Desiertos. Espacio exterior, estado interior es interpretada por Ana Yadira Arroyo, Marcelo Cerón, Erik Tepal, Claudia Álvarez (Titi), Berenice Avilés, Eréndira Yadira Cruz, Zoar Jiménez, Xue Malinali V. Domínguez, Maureen Landa y la propia Lía Domínguez, integrantes de la compañía PuntOcero.

Lía Viridiana Domínguez explicó que las escenas son resultado de una investigación en la que se buscó otro tipo de expresión corporal, de ahí que se observen diferentes coreografías que parten del silencio o el no desplazamiento, la danza aérea o el movimiento alrededor del dibujo.

En Desierto, el paisaje se simula el crecimiento de un cactus y la manera en que se desarrolla en un espacio hostil. Las redes sociales y la era virtual son expuestas en La televisión, mientras que en El bar ve a un hombre adicto al poder y el alcohol que aunque trata de interactuar con los demás, termina por sentirse solo.

La danza y el dibujo se hacen presentes en La espina y, por último, en Espacio exterior el ser humano aparece frente a la inmensidad del universo, a partir de una fotografía capturada en la vía láctea donde la Tierra luce como un diminuto punto azul.

Destacó que la música fue hecha ex profeso por Alejandro Preisser y se caracteriza por diversos paisajes sonoros. También se observa un video con animación realizado por Tania de León Yong y Ulises Ledesma, un video tomado de las redes sociales sobre el espacio exterior y fotos del desierto.

Del desierto al vacío y la inmensidad, las escenas transitan por una especie de geografía emocional y psíquica tanto en territorios agrestes como internos, en entornos naturales o situaciones urbanas.

La metáfora de la ciudad es la difícil supervivencia individual, la soledad en espacios reducidos en medio de sobrepoblación. El desierto es la supervivencia en condiciones de adaptación y modificación de las características biológicas en climas singulares que generan resistencia y exotismo en las formas.

La compañía PuntOcero surgió en 2013, a partir de la interacción y la reflexión de diferentes disciplinas para la creación de arte contemporáneo con derivación escénica y corporal.

Con esta propuesta concluyó la temporada De todo como en botica en el foro del Centro Cultural Los Talleres con el objetivo de mostrar programas de experimentación escénica interdisciplinaria.

Revista Protocolo

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