Cultura

Gracias a Dios… ¡Semana Santa!

Durante la también llamada Semana Mayor, Protocolo te comparte la importancia y tradiciones religiosas de cada uno de los días santos

Texto: Luis Felipe Hernández Beltrán

El Lunes Santo se recuerda a Jesús de Nazareth corriendo a los comerciantes que vendían productos dentro del Templo de Herodes
El Lunes Santo se recuerda a Jesús de Nazareth corriendo a los comerciantes que vendían productos dentro del Templo de Herodes

Por fin, la Semana Santa ha llegado y con ella millones de personas en los países que cuentan con una mayoría de católicos, cristianos, evangélicos y otras religiones afines, podrán disfrutar de algunos días de asueto que ofrecen trabajos y escuelas.

Aunque muchos tomarán esta jornada para vacacionar y descansar, la fe cristiana pide a sus creyentes reflexionar sobre los días en que, según la Biblia en el Nuevo Testamento, fueron los tiempos de la Pasión de Cristo, donde se recuerda el calvario, crucifixión, muerte y resurrección de Jesús de Nazareth; así como a seguir los rituales eclesiásticos que dicta la tradición.

Si bien ayer, domingo, millones de feligreses acudieron a los templos con palmas y tallos con vegetación para celebrar el “Domingo de Ramos”, donde se recuerda el pasaje de la entrada triunfante de Jesucristo a Jerusalén, aclamado por la multitud que había atestiguado o enterado de milagros cometidos; Protocolo te presentará la importancia de cada uno de los días, historias y forma de celebrarse:

Hoy, Lunes Santo, según el evangelio de San Juan, al día siguiente del recibimiento popular con las palmas, Jesús acudió al templo de Herodes y sorprendido porque se había instalado un mercado, corrió a los marchantes quienes habían tomado el lugar a los que llamó ladrones; después, acudió a la casa de Lázaro, aquel hombre que años atrás había resucitado, para disfrutar de una cena en la que María Magdalena, hermana del hombre revivido, le unta perfumes. El apóstol Judas Iscariote, reclama que la fragancia, en vez de habérsele puesto al “maestro”, se la hubieran vendido a los pobres, a lo que Jesús contesta molesto a quien después lo entregaría: “A los pobres los tienen siempre con ustedes, pero a mí no me tendrán siempre”.

Antes que Jesús, Lázaro era perseguido por los sacerdotes judíos para matarlo, ya que, por el milagro de su resurrección, mucha gente siguió a Jesucristo, alejándose por completo de las sinagogas.

Aunque muchos pueblos en todo el mundo hacen procesiones y dedican oraciones especiales, el Lunes Santo no es más que el ritual de ir a la ceremonia litúrgica tradicional, en donde en las lecturas del evangelio, se recuerdan aquellos capítulos previos al calvario del Hijo de Dios. A partir de hoy y hasta el Miércoles Santo, los sacerdotes católicos visten una túnica morada como símbolo del arrepentimiento, ayuno, oración y penitencia, y que hay que realizar durante esos días.

Revista Protocolo

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