Para expresar hoy y siempre un amor que traspasa el tiempo, regala una joya única que rinde tributo al trabajo artesanal de los orfebres oaxaqueños
Oaxaca es una hoja en blanco en donde se han escrito un cúmulo de historias que evocan fuerza y sentimiento… Una de ellas data de 1932 cuando el doctor Alfonso Caso, ilustre arqueólogo mexicano, descubrió en Monte Albán, México, el tesoro de “La Tumba número 7”, la más notable de América que incluye una suntuosa diversidad de joyas y objetos prehispánicos confeccionados en plata, oro, cobre, turquesa, hueso, cerámica y piedras preciosas.
Todo vestigio deja huella, y años más tarde este hallazgo serviría de inspiración para doña Rosa Quevedo y su hija Tere Calvo quienes en el Centro de Oaxaca abrieron una joyería que rindió tributo al trabajo artesanal de los orfebres oaxaqueños de la época.
Para continuar con el legado, en 1962 doña Tere Calvo fundó la “Joyería de Tere” y en 1985, sus hijos Rogelio, Alberto y su nuera Inés se incorporaron a la empresa que posteriormente tomó como bandera de identificación el nombre: Oro de Monte Albán; un espacio que desde hace 54 años, con una cálida sonrisa, ha abierto sus puertas a turistas mexicanos, extranjeros y destacadas personalidades como: la reina Sofía de España, Christiane Magnani de Alemán, la reina Isabel de Inglaterra y Jacqueline Kennedy, entre otras.
Desde su origen los artistas de Oro de Monte Albán buscan preservar el legado de nuestros antepasados mixtecos y zapotecos a través de la fabricación de reproducciones de joyería de filigrana, oro y plata por medio de técnicas tradicionales. Cabe destacar que Oro de Monte Albán es la única empresa oaxaqueña que cuenta con la certificación del Grupo de Calidad otorgado por la Cámara de Joyería de Jalisco.
La colección prehispánica de Oro de Monte Albán que incluye réplicas de las piezas más simbólicas del tesoro de la “Tumba número 7”, es una evidencia de la habilidad y maestría que caracteriza a sus artesanos oaxaqueños. Para lograr esta colección, sus orfebres realizaron una completa investigación histórica y la empresa obtuvo la aprobación de reproducción por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México.
Madre, mujer y diosa
Existe un vínculo único entre una madre y sus hijos. Una madre ha jugado un papel importante en el mundo prehispánico y en el universo actual, es ejemplo de amor y fortaleza.
Este 10 de mayo, Oro de Monte Albán presenta un mosaico de piezas fabricadas en oro y plata para expresar “un amor que traspasa todos los tiempos”.
Localizado en pleno corazón del Centro Histórico de la Ciudad de México, el imponente Palacio de los Condes de Miravalle ilumina el acceso de The Shops DownTown, el complejo en donde se localiza la boutique Oro de Monte Albán, un espacio en donde el consumidor podrá encontrar adicional a la colección prehispánica, las ediciones especiales de la firma: Filigrana, Colonial, Autor (innovadoras propuestas de diseñadores nacionales) y las piezas de la mexicana Ileana Rojas.
Ilumina a mamá con la luz de una diosa
Coyolxauhqui
Los orfebres de Oro de Monte Albán rinden tributo a la belleza de “Coyolxauhqui”, hija de la diosa Coatlicue. Esta espléndida pieza mexica fabricada en oro y plata representa a la diosa mexica lunar en todo su esplendor.
Mictlantecuhtli
Detalles sublimes que transmiten poder y elegancia suprema en la pieza “Mictlantecuhtli” fabricada en oro y plata por Oro de Monte Albán.
Revista Protocolo
