Cultura

Motecuhzoma II, resignificando la historia

Basada en la partitura de Vivaldi, participan 150 artistas en un escenario de 60 metros y se presentará el 7 y 8 de noviembre próximo en el Zócalo de la CDMX

Revista Protocolo

Ciudad de México, 3 de octubre de 2019.— Cuando los españoles llegaron a México Tenochtítlan no sabían pronunciar Motecuhzoma y decían Muteczumo, que luego devino Moctezuma. Desde entonces se pronuncia mal el nombre del tlatoani y se conoce, básicamente, la versión de los ganadores y de quienes escribieron la historia.

Ahora se puede ver la réplica indígena sobre la conquista y conocer la voz de los mexicas. El 7 y 8 de noviembre se estrenará en el Zócalo de la Ciudad de México la ópera monumental Motecuhzoma II, a partir de música de Antonio Vivaldi (1678-1741) y el músico y escritor mexicano Samuel Máynez Champion.

La Secretaría de Cultura de la CDMX presenta un montaje para conmemorar 500 años del encuentro entre el gobernante mexica y Hernán Cortés. Por primera vez en la historia de la ópera se escenifica una refutación argumental sobre personajes y hechos históricos.

Es una reelaboración del dramma per musica Motezuma de Vivaldi, realizada con apego a las fuentes históricas sobre la Conquista, en particular una recopilación de textos que conforman la Visión de los Vencidos. Un espacio para la réplica indígena sobre su propia conquista.

Motecuhzoma II es la revisión actual de una ópera del pasado que resignifica nuestra comprensión histórica de lo que fue la Conquista de México, el sincretismo cultural, mezcla de dos grupos humanos con luces y sombras que se produjeron, cuya proyección hoy tiene consecuencias vivientes entre España y Mesoamérica. También es una obra plurilingüista y pluricultural que se representará en español, náhuatl y maya.

Máynez Champion realizó una investigación meticulosa y exhaustiva que le llevó cerca de una década. Escribió la ópera basada en una partitura de Vivaldi titulada Motezuma, desaparecida durante tres siglos y encontrada en Kiev, Ucrania en 2002. La música tenía mutilaciones severas y en un estado de conservación tan precario, que su reconstrucción era obligada. El trabajo de restauración de la música perdida y reelaboración del manuscrito, llevó a Máynez a extraer la obra de la tradición barroca para darle un sentido histórico real.

La representación del 7 y 8 de noviembre contará con la dirección de José Luis Cruz y el director español Ignacio García, quienes trabajarán al frente de la Orquesta Filarmónica de la CDMX, con 30 músicos, a cargo de Fanna. Cabe señalar que además de las lenguas, fueron yuxtapuestos instrumentos musicales prehispánicos sobre la orquestación europea. Con esta premisa se apela a una clave utópica en el sentido del diálogo paritario que logran los instrumentos prehispánicos con los europeos, diálogo que nunca han conseguido los seres humanos.

Habrá alrededor de 150 personas en escena, entre actores, solistas, coristas, danzantes, jinetes, músicos y bailarines.

Con tres actos y una sinfonía, Motecuhzoma II sustituye a la farsa con final feliz de la ópera vivaldiana. En palabras de Enrique Graue, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, el trabajo refleja magistralmente el sincretismo de mundos: el de Tenochtitlan y el de los conquistadores, el de Vivaldi y el de Motecuhzoma, el de la academia y el arte.

Países que nos están viendo

ALIANZAS