La banda tica ofrece un nuevo concepto musical que fusiona el jazz con otros ritmos
Revista Protocolo
Infibeat, banda costarricense que, después de diez años de su formación, visita México, ha conquistado varios oídos nacionales; y es que el grupo no se imaginó tan agradable recibimiento y mucho menos un público que le pide no parar de tocar.
Cinco fueron sus presentaciones en el país, cuatro en la Ciudad de México y una en Xalapa, Veracruz, en importantes centros nocturnos que han recibido a grandes bandas y que se llenaron de música con nuevos tintes; coqueteos africanos, ritmos caribeños, afrobeat, hip hop, jazz, funk, reggae, acompañados de letras que recalcan un símbolo de consciencia respecto al significado de ser latino, además de hacer un llamado a reconocer nuestras raíces y todo aquello que, históricamente, nos ha formado.
Fabrizio Walker (voz), Andrés Cordero (bajo y voz), Daniel Solano (guitarra), Andrés Cervilla (trombón), Federico Granados (saxofón) y David Vargas (batería) hicieron un gran clic con el público.
“La gente se está atreviendo a escuchar piezas distintas, ya no se queda en el statu quo y México no es la excepción. Como colectivo también venimos a aprender del país y le agradecemos poder recibir nuestra música”, comentó Andrés Cervilla.
Ahora en su regreso a Costa Rica, les esperan los preparativos del concierto por su décimo aniversario, años en los que han consolidado su sonido musical y lo han transformado en el característico de Infibeat.
