Por Helen Krauze
Aunque usted haya visto esta película del genial Almodóvar, por favor no deje de asistir a la puesta en escena de esta obra, en el teatro Insurgentes de la capital mexicana.
Para empezar, presenta una impresionante e inusual escenografía del diseñador, Jorge Ballina, ganador de la medalla de oro como mejor escenógrafo en el World Stage Design 2005 en Toronto.
Las enrejadas paredes, sólo cambian a la entrada de los actores durante la trama, estilo realmente innovador.
Es menester reconocer la inigualable dirección de Francisco Franco, considerado el mejor de México, el cual parece llevar de la mano a cada uno de los personajes y colocarlos en el lugar debido, en el momento idóneo. Franco es egresado del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) y entre sus muchos éxitos se encuentra el video musical Como sé, de Julieta Venegas, que ganó un MTV Award. La obra Kinder Cabaret, bajo su dirección representó a México en la Feria Mundial 2000, en Alemania; ha ganado dos Arieles y los premios Descubrimiento en el Festival de Tolouse, Francia.
En cada escena, se mueven las translúcidas paredes para darnos a conocer la conmovedora historia, con todo el drama que se desarrolla con la sinceridad y la dureza de las vidas entrelazadas, salpicadas —en partes— con un idioma quizá soez para algunos, pero que la obra requiere y el público aplaude alegremente.
Sobre los actores, qué decir de la belleza y el talento de Margarita Gralia; Lisa Owen, representa con emotividad y fuerza el papel de la madre; Ana Claudia Talancón, la linda joven que tanto admiramos en Arráncame la vida, es Rosa, una monja incomprendida por su madre, actuada por Silvia Mariscal; Alejandra Bogue es el gracioso travesti; Ilse Salas, cuyo papel de drogadicta es realmente insuperable, y por último, Juan Pablo Gil, el hijo y gran observador del drama.
Vale decir que la obra rinde homenaje a grandes películas de Hollywood como Un tranvía llamado deseo y All about Eve de donde Almodóvar toma el título de la película y de esta obra de teatro. Y para terminar Bodas de sangre, que acentúa aún más la actuación de Margarita Gralia.
La productora de esta obra es Tina Galindo, una de las promotoras más entusiastas del teatro en nuestro país.
Revista Protocolo
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