Acuden la embajadora de Irlanda y descendientes de John O’Reilly a la ceremonia y guardia de honor
Texto y Fotos: Luis Felipe Hernández Beltrán
A 168 años, todavía queda vivo el recuerdo de aquellos soldados migrantes irlandeses, quienes para huir de la “Gran Hambruna”, epidemia que sacudió su país, decidieron desplazarse rumbo a Estados Unidos y por desafiar al ejército de aquellas tierras, realizaron una fuga a México y se unieron a las tropas mexicanas para enfrentar en suelo azteca a los vecinos del norte. Estos miembros de la milicia irlandesa se hicieron llamar “Batallón de San Patricio”, en honor al santo patrono de aquel país.
Por eso, desde 1959, cada 11 de septiembre, fecha en que se conmemora el ahorcamiento de quienes conformaron el batallón a manos de soldados estadounidenses, la Delegación Álvaro Obregón recuerda tan importante acontecimiento para México e Irlanda en el lugar donde se llevó a cabo el suceso: la plaza San Jacinto, en la colonia San Ángel.
El pasado viernes 11, día del aniversario, se dieron cita autoridades de la Delegación Álvaro Obregón, diplomáticos de la Embajada de Irlanda en México, destacando la presencia de la embajadora, Sonia Hyland; vecinos de la Plaza San Jacinto y la comunidad irlandesa radicada en México. Los invitados especiales fueron los descendientes de John O’Reilly, comandante de aquel Batallón de San Patricio.
Se pronunciaron discursos de parte de Edgar Rojano, director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México; de la embajadora, Sonya Hyland, y de Joaquín Meléndez Lira, jefe delegacional en Álvaro Obregón; todos, en sus participaciones, hicieron un recuento de los hechos de aquel entonces y remarcaron el legado del Batallón de San Patricio: la valentía, solidaridad y el amor por México. Además de refrendar los lazos diplomáticos y amistosos que hay entre ambas naciones.
Pero la intervención que más conmovió, fue el pronunciamiento de David Costello, jefe de Misión de la Embajada de Irlanda en México, tras nombrar a cada uno de los integrantes del Batallón de San Patricio y finalizar con un “Murieron por México” en tres ocasiones.
El acto finalizó con una guardia de honor en la placa que lleva escritos los nombres de aquellos héroes.
La Orquesta Filarmónica de la Delegación Álvaro Obregón y la Banda de Gaitas del Batallón de San Patricio amenizaron la ceremonia.
Revista Protocolo
