Antonis Grivas y su familia dicen adiós luego de cuatro años en México
Por Sinhué Bellescusa Mendieta
El embajador de Líbano entregándole la charola de despedida al embajador Antonis Grivas |
La Comunidad Helénica fue la sede en la que se reunieron colegas y amigos del embajador de Chipre en México, Antonis Grivas, para brindarle la despedida de nuestro país, México, tanto a él como a su familia.
El embajador Grivas —quien inició su etapa como diplomático en 1991— mencionó: “los cuatro años en México han pasado tan rápido, es increíble, es como haber llegado ayer”.
Asimismo expresó a los asistentes que se va con memorias buenas y malas: “Una mala es la despedida y una buena memoria es la amistad que me han ofrecido ustedes a mí y a mi familia estos cuatro años.”
Además aprovechó la oportunidad para agradecer a las autoridades de México, al Ministerio de Asuntos Exteriores, sobre todo a la dirección de Europa y de Protocolo, así como a todos los que le han ofrecido la cooperación y la amistad.
Por su parte el embajador de Líbano, Nouhad Mahmoud, aseveró: “todos conocimos al embajador Grivas y a su esposa como una pareja muy cálida y amistosa en nuestra comunidad diplomática y en diferentes círculos sociales mexicanos”.
De esta manera, agregó que la presencia de embajadores y amigos de Antonis Grivas es un testimonio concreto de todas sus amistades dentro de todos los ámbitos de la vida en este país, deseándoles una vida llena de prosperidad y éxito.
Antonis Grivas recibió la charola firmada por el cuerpo diplomático, de manos del embajador de Líbano en su papel de decano del cuerpo diplomático acreditado en México.
Revista Protocolo
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