Entrevista con Héctor Echeverría, consejero agrícola de Chile
Por Jacqueline Jiménez Martínez
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| Héctor Echeverría |
Chile se destaca por tener un modelo económico abierto y estable que favorece el comercio y la inversión, y que es respetado y elogiado en el mundo. Esto aunado a su situación privilegiada en el globo, pues desarrolla su mayor producción en contra estación, por ubicarse en el hemisferio sur, lo cual le permite abastecer de productos que escasean en determinadas épocas al otro lado del mundo.
La geografía sobrecogedora, variada y pura, así como las extensas áreas del territorio chileno que poseen un clima templado, conforman las óptimas condiciones de clima y suelo, favoreciendo la producción de una oferta continua y variada. No por nada y gracias a la diversificación de sus exportaciones y su creciente dinamismo, Chile ocupa el primer puesto del mejor país para invertir en América Latina, de acuerdo con la última clasificación elaborada por Economist Intelligence Unit, en el periodo 2005-2009.
En México, Chile cuenta con una agregaduría agrícola, dependiente del Ministerio de Agricultura, que trabaja para el exportador de productos silvoagropecuarios y pesqueros destinados al mercado mexicano. A la cabeza de esta oficina se encuentra Héctor Echeverría, consejero agrícola de la Embajada de Chile en México, con quien Protocolo tuvo la oportunidad de platicar para conocer la importante labor que su oficina lleva a cabo.
Relación Chile-México
La relación entre Chile y México, en materia agrícola, se restableció en 1990, a partir de que se reanudó la democracia, después de que la república chilena viviera una dictadura por 17 años. De esta manera empezó el acercamiento entre ambos países, que desembocó en un Acuerdo de Complementación Económica en 1991, y que después maduraría en el Tratado de Libre Comercio, en 1998. Posteriormente, de 2005 en adelante, se empleó el Acuerdo de Asociación, en el que convergen todas las materias: comercio, servicios, inversiones, propiedad intelectual y cooperación.
“Hoy en día tenemos una balanza bastante equilibrada, de seis mil 800 millones de dólares repartidos entre los dos países, pues hay un intercambio recíproco. No le hacemos daño a nuestra producción industrial, pues nos enviamos productos totalmente diferentes, es una economía bastante complementaria la una de la otra”, dijo Echeverría.
El principal producto que exporta Chile a México es la madera, y todo lo referente a ella, seguido de frutas como la manzana, la uva, el durazno, la cereza, y con un creciente mercado en aceite de oliva, aceite de pescado, aceite de rosa mosqueta, y algunos alimentos preparados. Por su parte México exporta a Chile: aceite de pescado, aceite de ajonjolí, aguacate, aguardiente de uva, y un gran abasto de semillas.
Echeverría recordó que con la crisis económica y de la influenza en 2009, las balanzas comerciales y las ventas cayeron, asimismo hubo producción que se desvió hacia Europa por una menor demanda del consumo interno; no obstante, el mercado se mantuvo abierto para los dos lados. “Tratamos de potenciar nuestras campañas para poder llegar a los niveles históricos de 2007, donde teníamos alrededor ocho o nueve millones de cajas exportadas a México.”
El agregado afirmó que en un futuro los productos que podrían generar oportunidades de comercio son los gourmet y los orgánicos: “aquellos que tienen un valor agregado, un proceso extra, pues la gente los valora mucho y representan una alternativa para desarrollar nuevos mercados. También es necesario educar a la población para que conozcan nuevos productos”, afirmó.
Y agregó: “Estamos tratando de que los productos vayan en crecimiento, tanto en cantidad como en variedad, razón por la cual hemos hecho actividades con Sagarpa, a fin de promover los productos mexicanos en Chile, que tienen muy buena aceptación y viceversa, pues tenemos mucha afinidad cultural, por ejemplo, en el campo chileno la única música que se escucha es la ranchera”, apuntó animado el consejero chileno.
Aunque es más difícil que las exportaciones mexicanas lleguen al sur, porque Estados Unidos está más cerca de muchos productores, Echeverría dejó abierta la puerta para llegar en cualquier momento a su país: “lo importante es que tengan otra alternativa, y si se llegara a generar algún problema de índole comercial con el norte, o se da una sobreproducción, fácilmente lo podrían enviar al sur”.
Además —insistió—, hay que ver a Chile como la entrada al Pacífico, que por su cercanía con Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Perú, tiene una variedad de puertos de acceso para su distribución terrestre.
“Yo he sido un ferviente luchador para que el sector privado mexicano se interese en aumentar sus exportaciones a Chile. El comercio va andando solo, pero si somos capaces de visualizar más y mejores productos y oportunidades, será de gran ayuda para todos”, mencionó.
Medios de información para exportadores
El agregado agrícola afirmó que la principal situación que obstaculiza el intercambio comercial entre Chile y México, es la desinformación por parte de los exportadores: “tenemos que estar con mucho cuidado respecto de lo que hacen nuestros empresarios, por eso tratamos de capacitarlos al máximo, a fin de que no cometan errores, y eso lo hemos logrado con giras tecnológicas, teleconferencias, visitas con expertos, consultorías, siempre tratando de que en los autoservicios sanitarios de ambos países haya una homologación de conocimiento”.
Y reiteró: “Yo creo que no tenemos grandes problemas, lo que veo son oportunidades para ir mejorando en la capacitación de nuestros exportadores e importadores. Estamos para servirles, hay algunas materias que no manejamos, pero afortunadamente tenemos buenos contactos y podemos indicarles el camino correcto.”
Consejero agrícola
Héctor Echeverría, quien cumplió en marzo dos años al frente de la consejería agrícola, de manera modesta habló de los logros que ha llevado a cabo en su corto periodo de gestión. “En dos años he tenido la oportunidad de fortalecer al equipo, de aprovechar su sinergia, su calidad profesional y humana”. Por otra parte, en materia de ingresos, el sistema de solución de retenciones de mercancías chilenas en puntos de ingreso a México generó un ahorro de 1.6 millones de dólares en gastos logísticos durante el 2009.”
El funcionario chileno aseguró que hay métodos que México puede aprender de Chile, como en materia de cooperación técnica bilateral, experiencia en la apertura del mercado, funcionamiento del sistema de producción y certificación forestal, entre otras, y apuntó que esto sólo se puede lograr trabajando en conjunto.
Por tal motivo, desde 2006 los dos países latinoamericanos se propusieron asociarse estrechamente para abordar terceros mercados. Un ejemplo de esto, es la unión que hicieron para exportar a Rusia y Asia, proyecto en el que están a la espera de que el Fondo de Cooperación Chile-México publique los resultados de su convocatoria 2009, en la cual se presentaron dos proyectos del sector agrícola, que de realizarse podrán favorecer las exportaciones a estos mercados, en donde hay un potencial de 50 millones de nuevos ricos en Rusia, y entre 70 u 80 millones en China. “Son gente que consume mucho y demanda alta calidad.”
Y subrayó: “con México no somos competencia, vamos a los mismos mercados, pero con distintos productos o en época distinta”.
Echeverría subrayó que dentro de las actividades que tendrán para este año se encuentran: la semana de Chile, que se celebrará en el mes de julio, la semana gastronómica, y una semana de intercambio industrial con empresarios chilenos y mexicanos.
Chile, potencia alimentaria y forestal
El lema Chile, potencia alimentaria y forestal, es un lineamiento político, que se asumió con la llegada de la ex presidenta Michelle Bachelet, en donde se propuso tratar de que Chile se transformara en una potencia alimenticia, aunado al tema de crecimiento con igualdad, el apoyo a los pequeños campesinos, y el medio ambiente.
“Se trata de hacer un salto cuantitativo y cualitativo, y que en el ranking que hace la FAO para 2012, podamos estar dentro de los diez primeros países con mayor exportación de alimentos. Cabe señalar que en 2007 Chile apareció en el lugar 27 y México en el 16.
“Vamos junto con México en la dirección correcta, queremos que todas las mesas del mundo puedan disfrutar de los productos chilenos”, concluyó.
Revista Protocolo
