Fundada por Pietro Barilla, la empresa nació en Parma, Italia, en 1877, como una tienda de pan y pasta. Hoy, a más de 125 años, el Grupo Barilla es líder en producción, distribución y comercialización de pastas alimenticias con presencia en más de 100 países alrededor del mundo, 25 plantas y ventas superiores a los dos mil millones de dólares anuales.
En entrevista con Protocolo Fabio Colliva, director general de Barilla México, comentó que la pasta Barilla ya se vendía en México como un producto importado hasta septiembre de 1997, fecha en que inició Barilla México como una filial directa de Barilla Alimentaria, y que registra ventas por 40 millones de dólares al cierre de 2002.
“Barilla decidió invertir en México, porque aparte de Europa occidental, Estados Unidos, Australia, Japón y Canadá, México es el país más interesante en el mundo, porque es grande, políticamente estable y tiene un mercado potencial muy importante”, señaló el titular.
A partir de 2001, el Grupo buscó una alianza con un partner local para reducir los costos y aumentar el tamaño del negocio. Así conocieron al Grupo Herdez y después de iniciadas las pláticas, se cerró un contrato al 50 por ciento en un tiempo récord de dos meses y medio.
Asimismo, en enero de 2002, Barilla compró las marcas Yemina y Vesta, dos pastas propiedad del grupo Kraft, el cual no estaba interesado en continuar el negocio de la pasta en México. Con la incorporación de estas marcas, Barilla México espera obtener una participación de mercado del 30 por ciento; Yemina y Vesta con el 22 por ciento y Barilla con el 7.7 por ciento.
Fabio Colliva argumentó que el sector de la pasta en México es muy regional, por ejemplo, La Moderna, líder nacional en el sector, tiene poca participación en el norte del país con 4 por ciento, mientras que en la ciudad de México ostenta el 60 por ciento. Yemina es líder en el norte-Pacífico con el 50 por ciento del mercado, en tanto Vesta es una marca fuerte en el sur del país.
Marcas
El portafolios de Barilla México abarca tres marcas: Barilla, una pasta italiana de calidad presente en todos los autoservicios del país; Yemina en el norte “es la pasta”; y Vesta, de buena calidad y precio accesible. Todas están posicionadas de manera diferente, en el canal de mayoreo como en autoservicios.
A partir de julio de 2002, Grupo Herdez adquirió un terreno en la zona industrial de San Luis Potosí, donde se construye la planta de Barilla para producción de pastas alimenticias y que iniciará operaciones en julio próximo; asimismo se construye un centro de distribución y una planta de producción de McCormick. La inversión se estimó en 20 millones de dólares, de los cuales, la mitad se utilizó para el terreno y la construcción y el resto para compra de equipo.
El consumo per cápita de pasta en México es de cuatro kilos al año, en Italia es de 28 kilos, mientras que Estados Unidos, Perú y Venezuela consumen casi ocho kilos cada uno y con una tasa de crecimiento al alza. Entonces es natural ver al mercado mexicano como muy potencial.
Finalmente se hizo énfasis en una fuerte campaña de comunicación respecto del consumo de pasta. “El país tiene una cultura gastronómica muy fuerte, donde la pasta existe, pero es pasta en sopa. La pasta en Italia es como la tortilla para los mexicanos, es muy neutral, nutritiva y se puede combinar de muchas formas, además que no engorda como se cree en México.”
Las pastas fabricadas por Barilla México se segmentan en:
Pasta larga: espagueti, fideos, etc.
Pasta corta seca: pluma, tornillo, codo, etc.
Pasta para sopa o menuda: surtidos.
Pastas especiales o gourmet: fetuccinni, lasagna, etc.
Línea “Selezione Oro Chef”: para el canal Food Service, Restaurantes, etc. (distribuidores autorizados)
