Internacional

La “Gandhi saharaui” es detenida por las autoridades marroquíes

Solicitan la intervención urgente de la comunidad internacional para solidarizarse con esta ciudadana saharaui, hasta que pueda volver a entrar a su país y reunirse con sus familiares con dignidad

lagandhisaha
Aminatou Haidar

Aminatou Haidar, una de las principales voces del movimiento saharaui pro derechos humanos en las zonas ocupadas del Sahara Occidental, fue detenida el pasado 13 de noviembre por las autoridades marroquíes al arribar al aeropuerto de El Aaiún, capital de la República Saharaui, y devuelta al siguiente día a Lanzarote, Islas Canarias, impidiéndole así regresar a su casa, informó mediante un comunicado de prensa la embajada de la República Saharaui en México.

Debido a la detención, Aminatou no pudo regresar a su residencia donde están sus hijos. Junto a ella, fueron retenidos también los periodistas españoles Pedro Barbadillo y Pedro Guillén, que trabajan de freelance colaborando ocasionalmente con medios españoles.

Esta acción, que decretó el régimen marroquí, ha sido condenada y rechazada por muchos países y organizaciones internacionales pro derechos humanos, al ser una violación a los derechos humanos y a la legalidad internacional, sostiene la legación diplomática saharaui.

Actualmente, Haidar, que se encuentra en espera en el aeropuerto de Lanzarote, está pidiendo al gobierno español que resuelva su situación e intervenir ante las autoridades marroquíes, para que le permitan regresar a su país. La activista no pidió ser transferida a España y, por consiguiente, decidió iniciar una huelga de hambre y permanecer en el aeropuerto de Lanzarote hasta que goce de sus derechos fundamentales que le permitan regresar a su país. Haidar asegura que su deportación desde El Aaiún se realizó con la complicidad entre los gobiernos marroquí y español, y por lo tanto, su huelga sólo será interrumpida cuando le sea garantizado su retorno a El Aaiún, donde se encuentra su familia.

La acción de esta activista ha recibido numerosas muestras de apoyo, como la del Intergrupo del Parlamento Europeo y de otras muchas organizaciones no gubernamentales (ONG) pro derechos humanos, puesto que consideran que Marruecos no tiene potestad jurídica sobre la ciudadanía saharaui ni sobre su territorio ni sobre sus recursos naturales al ser una potencia ocupante, por la vía militar.

Haidar, conocida como la “Gandhi saharaui”, regresaba a El Aaiún después de recibir en Nueva York el “Premio Coraje Civil 2009” de la Fundación Train, que se suma a otras distinciones recibidas, como el Premio de Derechos Humanos Robert Kennedy que recibió el año pasado en una ceremonia en el Senado estadounidense.

La causa principal de su detención fue la gira internacional que realizó en las dos últimas semanas, para explicar la difícil situación de los derechos humanos en las zonas ocupadas de la República Saharaui y para defender la autodeterminación del Sahara Occidental, anexionado por Marruecos en 1975.

Aminatou Haidar, de 42 años, ha sido galardonada, entre otros, con el Premio de Derechos Humanos Robert F. Kennedy 2008, con el Silver Rose Award 2007 y con el Premio de Derechos Humanos Juan María Bandrés de 2008, además de ser candidata para el Nobel de la Paz.

Un mes antes, siete figuras defensoras del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación: Ali Salem Tamek, Brahim Dahan, Rachid Sghaïr, Nassiri Hamadi, Yehdih Terruzi, Saleh Loubeihi y Degja Lechgar, habían sido detenidos a su llegada al aeropuerto de Casablanca, después de que habían visitado durante nueve días los campamentos de refugiados saharauis en Argelia, con el único fin de visitar a sus familiares a los cuales tenían más de 30 años sin ver a consecuencia del Muro de la Vergüenza que divide el pueblo saharaui y su territorio.

Sin embargo, el comunicado emitido por la embajada saharaui señala que éstos no fueron los únicos saharauis secuestrados por Marruecos; el día 6 de octubre otros cinco activistas desaparecieron cerca de la frontera saharaui con Mauritania. Las autoridades marroquíes les confiscaron sus documentos y los abandonaron en medio del desierto tras ser interrogados y torturados.

La representación diplomática sostiene que esta oleada de detenciones, deportaciones y aprisionamientos es una continuación de un periodo oscuro que se ha agudizado desde 2005 en los territorios ocupados del Sahara Occidental tras el rotundo rechazo de Marruecos, en violación del derecho internacional, de cooperar con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para crear las condiciones idóneas para que el pueblo saharaui decida su destino, a través de un proceso de autodeterminación, aprobado por todas las instancias internacionales.

Frente a esta situación, y al considerar estos actos una violación del derecho internacional y los derechos fundamentales del hombre, el gobierno saharaui ha condenado vivamente la detención arbitraria y la expulsión forzada de Haidar, y de otros muchos activistas saharauis, ante: el secretario General de las ONU, ante su enviado personal para el Sahara y ante el relator para los Derechos Humanos de la ONU.

El Ejecutivo saharaui pidió además la intervención urgente de la comunidad internacional para solidarizarse con esta ciudadana saharaui, hasta que pueda volver a entrar a su país y reunirse con sus familiares con dignidad, gozando de todos sus derechos, de libertad de expresión y desplazamiento, así como ejercer presión, para que sean liberados todos los presos políticos saharauis, en las cárceles marroquíes, que podrían ser sentenciados a la pena de muerte.

Antes tales acontecimientos, la embajada saharaui en México solicitó la intervención y el apoyo urgente de la comunidad internacional, así como todas las organizaciones pro derechos humanos y de la opinión pública en general, para que se protejan los derechos humanos y la realización del Referéndum en el Sahara Occidental, así como el envío masivo de observadores internacionales y medios de comunicación a los territorios ocupados del Sahara Occidental, para que se arroje luz sobre las constantes violaciones de los derechos fundamentales de la indefensa población saharaui, además de que se protejan sus libertades individuales y se denuncien las injusticias que cotidianamente comete el régimen ocupante marroquí.

Revista Protocolo

Países que nos están viendo

ALIANZAS