La autora menciona tres casos actuales para ejemplificar lo que se vive en nuestros días en términos de amenazas globales que trazan el rumbo de la Segunda Guerra Fría 2.0
Colaboración invitada
Aribel Contreras Suárez*
Ciudad de México, 14 de mayo de 2021.— El mundo se enfrenta a un nuevo rostro en las nuevas amenazas globales. Antes, hablar de una amenaza global podía decirse que eran: enfermedades, fenómenos naturales o actos de grupos criminales que operaban de manera transnacional pero tenían nombre y apellido, nacionalidad, y un modus operandi hasta cierto punto predecible. Hoy, las amenazas delinean un nuevo mundo.
Amenazas
Debemos definir lo que es una amenaza para entender lo que está ocurriendo con respecto a las nuevas amenazas globales. Una amenaza puede ser considerada como cualquier fenómeno, algún desastre natural o aquel ocasionado por el hombre que pone en peligro a las personas y/o su ambiente. Las naturales pueden controlarse pero difícilmente evitarse. Algunos ejemplos son: tornados, huracanes, tsunamis, terremotos, incendios, inundaciones, deslizamientos, erupciones volcánicas, tormentas eléctricas y plagas. Sin embargo, las ocasionadas por el ser humano, pueden ser hasta más desastrosas que las naturales. Me refiero a las ocasionadas por la tecnología, industria, ciencia, diferencias culturales, entre otros. Incluso como sucesos o fenómenos tenemos al terrorismo, cambio climático, guerras; así como las crisis sanitarias, financieras o de cualquier otro tipo.
Nuevas amenazas globales
Agua, energía, alimentos, migración, infodemia, pandemias, populismos, demografía, nuevas armas, neoestatismos, ciberseguridad, nuevos actores, cambio climático, desglobalización, hiperconectividad, vacunacionalismo, nuevos polos de poder, instalaciones estratégicas, sobreexplotación de los recursos naturales, debilitamiento de organismos multilaterales, disrupción de cadenas de suministro de productos o sectores estratégicos. En entregas más adelante, hablaré a detalle de algunas de estas.
Casos
Mencionaré tres casos actuales para ejemplificar lo que estamos viviendo en nuestros días en términos de amenazas.
1.- La pandemia por el covid-19. Es incuantificable el daño económico, de pérdidas humanas y de las consecuencias generadas por esta crisis sanitaria mundial. Lo que ha estado alrededor de esta lamentable situación es: la infodemia, el debilitamiento/cuestionamiento hacia algunos organismos internacionales, la disrupción en las cadenas de suministro de muchos bienes, el vacunacionalismo, la politización, el robo de información a centros de investigación clave para las vacunas, el surgimiento de nuevos actores estratégicos como las farmacéuticas, y el poder que tienen algunos países por tener el control de la producción de las vacunas.
2.- El bloqueo del barco Ever Given en el canal de Suez. Este caso mostró que una infraestructura geoestratégica pudiera tener implicaciones jurídicas, comerciales y políticas en un plazo inmediato pero también a corto y mediano plazo. La hiperconectividad entre una región y otra a través de este canal nos deja la reflexión sobre la desglobalización.
3.- La empresa Colonial Pipeline que administra el oleoducto más grande de Estados Unidos. La semana pasada se filtró información de que un grupo dedicado a la cibercriminalidad a escala internacional denominado Darkside tomó el control del sistema de información de dicha empresa. Se sabe poco sobre quiénes son los que están detrás de esta organización criminal cibernética, se asume que pudiera estar establecida en Rusia pero lo que se sabe con certeza es que su objetivo es hackear el sistema informático de grandes empresas para paralizar sus operaciones, pedir un rescate monetario que puede oscilar entre 200 mil y 20 millones de dólares, y en caso de que no acceder, chantajear con hacer pública la información que tiene cibersecuestrada y no devolver el control del mando cibernético. Entre sus víctimas están: hospitales, oficinas de gobierno, empresas multinacionales, entre otras. Las implicaciones son a escala global. El gobierno estadounidense declaró estado de emergencia por el cierre de este oleoducto en virtud de que su control está en manos de Darkside (según la investigación del FBI y la declaratoria misma de dicha organización criminal) y no es posible operarlo. Colonial Pipeline opera este oleoducto que suministra el 45 por ciento del combustible del lado este de EEUU, abastece 100 millones de galones de combustible diarios y da servicio a siete aeropuertos. Por lo que el cerrar la llave tiene una afectación a millones de usuarios y el precio de petróleo comenzó a tener una muy ligera alza el lunes. Se espera que para este fin de semana, el tema haya quedado resuelto (Para más detalles: https://twitter.com/AribelContreras/status/1392095488934035460)
Por lo anterior, es que estoy convencida que estas nuevas amenazas globales trazan el rumbo de la Segunda Guerra Fría 2.0. No podemos hablar de que una nueva guerra fría va a ser en las mismas condiciones que lo fue en el pasado, por lo que esta segunda versión, tiene sus matices diferentes y se da a la luz de una pandemia donde el mundo multipolar reconfigura el nuevo desorden mundial.
* Coordinadora de la Licenciatura en Negocios Globales en la Universidad Iberoamericana
Twitter y Linkedin: @AribelContreras, Facebook e Instagram: aribeldiplomatique
