El mandatario mexicano asistió a la ceremonia en la que Sebastián Piñera Echenique asumió la presidencia de Chile por segunda ocasión
Revista Protocolo
El presidente Enrique Peña Nieto participó ayer en la ceremonia de transmisión del mando presidencial en Chile, en la que Sebastián Piñera Echenique asumió por segunda ocasión la presidencia de dicho país.
Al acto, que tuvo lugar en la sede del Congreso Nacional de Chile, en la ciudad de Valparaíso, asistieron también los mandatarios de Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Honduras, Paraguay y Perú, así como el rey emérito de España Juan Carlos I y otros representantes de gobierno, funcionarios y diplomáticos de distintos países.
Después de la ceremonia oficial, los jefes de Estado y de gobierno invitados, junto con sus comitivas, acudieron al almuerzo que ofreció el presidente Piñera en el Palacio Presidencial de Cerro Castillo, en la ciudad de Viña del Mar.
Más adelante, el primer mandatario mexicano se reunió con su homólogo de Honduras, Juan Orlando Hernández, con quien profundizó en temas de la agenda bilateral.
El presidente Peña Nieto también sostuvo un encuentro con el diputado de la Asamblea Nacional de Venezuela, Julio Borges, y el coordinador Político Nacional del Partido Voluntad Popular, Carlos Vecchio. Escuchó de los representantes de la oposición sobre la grave realidad que vive Venezuela y su agradecimiento por la solidaridad mostrada por México. El presidente reiteró su apoyo a los esfuerzos diplomáticos en la región para que, por medio del diálogo, los venezolanos encuentren una solución pacífica y democrática de la situación.
La participación del presidente Peña Nieto en la ceremonia de cambio de poderes en Chile refleja la dinámica y fluida relación con ese país, que se ha fortalecido desde el restablecimiento de las relaciones bilaterales en 1990. Para México, profundizar el diálogo político, impulsar las relaciones comerciales y de inversión, así como ampliar la cooperación entre ambos países es fundamental.
Chile es el tercer socio comercial de México en América Latina y el Caribe, con un comercio bilateral que casi se ha duplicado desde la entrada en vigor, en 1999, del Tratado de Libre Comercio entre ambos países, y que asciende a tres mil 341 millones de dólares. México y Chile son, además, socios en la Alianza del Pacífico, exitoso mecanismo creado en 2011 junto con Colombia y Perú, que promueve la integración económica en la región. Por su parte, México ocupa el tercer lugar entre los países proveedores del mercado chileno en la región.
