Vivir en Reserva Santa Fe, el primer desarrollo inmobiliario de construcción regenerativa en México y Latinoamérica, así como ser parte de su selecta comunidad, representa un privilegio exclusivo, pero también el compromiso y responsabilidad de respetar a sus todos residentes, a las poblaciones aledañas y a la naturaleza que les rodea
Ciudad de México, 6 de noviembre de 2022.— Entre el Valle de la Ciudad de México y el Valle de Toluca, dentro de Reserva Santa Fe, comienza a conformarse una exclusiva comunidad de vecinos que comparte el gusto por el máximo lujo pero, sobre todo, por la búsqueda del buen vivir en armonía con su ecosistema.
Ubicado a tan solo 15 min de Santa Fe, este desarrollo inmobiliario único en su tipo en México y Latinoamérica, se erige en medio del bosque con los espacios necesarios para que cada habitante viva en total plenitud de una manera sostenible, contribuyendo a la regeneración de su entorno natural, sin comprometer el bienestar personal ni la experiencia privada del lujo.
El complejo residencial de 500 viviendas y 25 hectáreas de amenidades busca el certificado Living Community Challenge, siendo el primer proyecto arquitectónico de construcción regenerativa en la región; cuenta con un diseño de irrigación pasiva de paisaje y lagos artificiales para mejorar el medio ambiente, realiza captación de agua pluvial para el 100% del proyecto, hace manejo y tratamiento de aguas residuales totales e implementa paneles solares en techos de viviendas y la Casa Club para generar toda la electricidad.
Esta filosofía integral para conformar una residencia sostenible y armónica con el ecosistema es parte inherente de la comunidad de vecinos de Reserva Santa Fe que, aunque diversa, está unida por sus sólidos valores, por lo que ser parte es un privilegio limitado a unos cuantos, pero también un fuerte compromiso con contribuir a una convivencia respetuosa y enriquecedora, tanto entre residentes inmediatos como con las comunidades aledañas y la propia naturaleza.
Al mismo tiempo, algunos de los beneficios al ser parte de esta selecta comunidad vecinal de Reserva Santa Fe es el uso de la granja y el vivero propios del complejo para la producción de insumos con criterios agroecológicos, donde los residentes pueden aprender a cultivar sus propios alimentos.
Cuenta con una Casa Club en la que se puede disfrutar de una alberca interior semiolímpica, una alberca exterior y un jacuzzi; el spa con cuarto de masajes y salón de belleza; asoleaderos, vapor y sauna; así como el gimnasio con sala de cardio (caminadoras, elípticas y escaladoras), sala de aparatos y de pesas, además del salón de aeróbicos, spinning, yoga y pilates. Todo esto sin olvidar el bar y, para los más pequeños, los juegos infantiles y la guardería.
Definitivamente, integrarse a la comunidad de vecinos de Reserva Santa Fe tiene sus privilegios y enormes satisfacciones, gracias a que el desarrollo inmobiliario redefine el concepto del buen vivir al integrar wellness, lujo y sostenibilidad en un mismo punto de convergencia incomparable, brindando un balance en la vida de cada uno de sus habitantes quienes disfrutan estar en sintonía con su ecosistema.
Fotografía: Reserva Santa Fe
