Revista Protocolo
Este verano hay que disfrutar del contacto con la naturaleza que solo la costa jalisciense ofrece, caminar por paisajes selváticos, realizar deportes extremos, actividades ecoturísticas o disfrutar de las puestas de sol que tienen las hermosas playas de Jalisco.
En Jalisco se podrá encontrar desde playas populares, como las de Puerto Vallarta, hasta espacios secretos ideales para descansar. Estas son cinco opciones que el Pacífico mexicano ofrece para vivir una experiencia inolvidable.
Chalacatepec. Playa de aguas cristalinas con acceso público 100 por ciento virgen que se encuentra a 25 minutos de Tomatlán sobre el corredor turístico de Costalegre, tomando la carretera de Barra de Navidad-Puerto Vallarta, donde se puede tener contacto con la naturaleza debido a la riqueza de la fauna que ahí se encuentra y la gran cantidad de manglares del lugar.
Además cuenta con arena suave que contrasta con la claridad del mar y el azul del cielo, generando una percepción visual agradable en el horizonte de la playa, que alberga en sus orillas un naufragio atribuido a piratas por sus habitantes.
Si bien no existen construcciones o servicios disponibles en la zona, hay que destacar la existencia de un campamento tortuguero, al ser un lugar ideal para la reproducción de la tortuga marina, donde suelen sumarse voluntarios para la protección y liberación de dichos reptiles.
Cuastecomates. Localizada en el municipio de Cihuatlán, esta playa se encuentra en una bahía protegida que proporciona un oleaje suave, ideal para la práctica de veleo, natación, buceo, el wind-surf y esnórquel.
Además, se destaca por ser una de las primeras playas incluyentes en México y el mundo, al contar con infraestructura y capacitación para la atención de adultos mayores o personas discapacitadas, pues se encuentra adaptada con señalizaciones, accesos, vialidades, mobiliario urbano y anfibio, que permite la movilidad de todos sus visitantes.
Punta Serena. Ubicada en la bahía de Tenacatita, su peculiar característica es que la ropa es opcional y se puede disfrutar de un contacto con el entorno al natural.
Con una vista al océano Pacífico, esta playa nudista combina servicios como temazcales, bares, spas y cenas románticas que conforman una experiencia única para parejas mayores de 21 años, que también podrán observar una vegetación conformada por palmeras, árboles de papaya y platanales, arropados por una espectacular puesta de sol.
Quimixto. Se encuentra en Cabo Corrientes, entre Las Ánimas y Majahuitas. Es otro litoral que combina selva y mar, no solo facilita a los visitantes viajes en lancha o practicar esnórquel en sus aguas cristalinas, también ofrece la experiencia de nadar en su cascada adentrada en un ambiente selvático.
Si se visita entre octubre y abril, el turista se llenará de adrenalina en los eventos para surfistas que se celebran de manera regular.
Bahía de Chamela. Destaca por ser la que más islas contiene en su interior en México, con un total de 11, a lo largo de 13 kilómetros de costa, es un espacio para una gran cantidad de aves marinas, tortugas, pepinos de mar, mantarrayas y peces globos que son visibles en la práctica del buceo a lo largo de las playas con un nivel de agua bajo que delimitan con Punta Pérula.
