Hasta el domingo 4 de febrero, tamaleros de México y Sudamérica ofrecen en el Museo de las Culturas Populares del centro de Coyoacán, exquisitos tamales y atole, de distintos sabores
Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán
La Ciudad de México se alista para los festejos del Día de la Candelaria, y como dicta la tradición católica, para llevar a bendecir a las iglesias al Niño Jesús, después habrá que apapacharlo con una deliciosa tamaliza, que ofrecen a familiares y amigos aquellos que sacaron el muñequito en la Rosca de Reyes.
Y lo que también es una tradición desde hace 26 años en los patios del Museo Nacional de Culturas Populares (Avenida Hidalgo 289, Col. Del Carmen, Coyoacán) a propósito de esta especial celebración, es la Feria del Tamal, que año con año reúne a destacados artesanos tamaleros de distintas partes de México y algunos países de Sudamérica que ofrecen una variedad de tamales y bebidas calientes para acompañarlos.
Hasta el domingo 4 de febrero, es la oportunidad ideal para acudir a este recinto museográfico coyoacanense y probar los distintos sabores que ofrecen los 50 puestos que se instalaron en esta ocasión.
La tarde de ayer, Rodolfo Rodríguez, director general del Museo Nacional de Culturas Populares, realizó la inauguración oficial, acompañado en el presídium por algunos de los cocineros, e invitó al público a seguir con la tradición, tanto de los proveedores, de continuar con la elaboración de tamales, compartiendo sus recetas a sus siguientes generaciones e innovando sus sabores, como de los consumidores, en seguir acudiendo a esta Feria del Tamal y disfrutar de las delicias que ahí se ofrecen.
Además, se realizarán demostraciones y conferencias con cocineros y especialistas, entre otras actividades culturales.
Rodríguez señaló que se espera que en este 2018, aumente la cifra de 50 mil asistentes de los años anteriores.
El precio de los platillos oscila entre los 15 y hasta 90 pesos. La entrada al Museo es libre y tiene un horario de 10:00 a 20:00 horas.
