Texto: Luis Felipe Hernández Beltrán
Estaría incompleta una plática o un libro sobre el mundo del automovilismo si no se le da un capítulo a Lee Iacocca.
Dos acontecimientos en la historia de la industria automotriz, el empresario y socialite estadounidense fue el protagonista principal.
En 1960, siendo director de la empresa Ford, hizo del modelo Mustang un clásico de esa empresa, al lograr vender cantidades exorbitantes alrededor del mundo.
Mientras que en 1979, justo cuando la empresa Chrysler estaba por desaparecer por una deuda millonaria, el empresario convenció al gobierno estadounidense del entonces presidente Gerald Ford que aprobara garantías por mil 500 millones de dólares para salvar a la automotriz, considerada como una de las más importantes de Estados Unidos.
Esos solo fueron unos de los tantos logros de Iacocca en la industria del comercio automotor, también se le reconoce el iniciar con la imposición de los automóviles compactos, entre ellos el minivan, que registraron altas ventas para la Chrysler en todo el mundo.
Pero no solo obtuvo triunfos como empresario y directivo de empresas automotrices, Lee Iacocca escribió dos libros que se volvieron best sellers, con temas sobre liderazgo y motivación personal; así como conferencista por todo el mundo de temas motivacionales, siempre hablando sobre sus éxitos en el mundo empresarial.
Dada su popularidad, fue invitado por el Partido Demócrata para ser candidato presidencial en las elecciones de 1981 para competir contra Ronald Reagan del Partido Republicano, pero prefirió no aceptar la candidatura.
Retirado de la industria automotriz mas no del mundo empresarial, Iacocca se dedicó promover su salsa para espagueti Iacocca’s Sauce y a realizar donativos para investigaciones sobre la cura de la diabetes.
Al morir la tarde del pasado martes 2 de julio (aunque la noticia del fallecimiento se dio a conocer ayer, miércoles 3 de julio), a los 94 años de edad en su residencia de Bel-Air, California, víctima del mal de Parkinson, Lee Iacocca concluyó un capítulo importante no solo en la industria automotriz, sino del sector empresarial de todo el mundo…
El carro se apagó para siempre…
