Se presentó un ensayo biográfico que repasa parte importante de su trayectoria política y personal
Revista Protocolo
En la sede de la Fundación Miguel Alemán se presentó el libro Porfirio Muñoz Ledo. Historia Oral 1933-1988, de los autores James Wilkie y Edna Monzón. Ahí, el destacado político mexicano expuso que enfrentamos un abismo político, porque después de la alternancia los beneficiarios abortaron la transición democrática.
En la ceremonia, en la que estuvo Miguel Alemán Velasco, Muñoz Ledo externó que la congruencia es el valor más alto de la democracia y “aspiro a que mi vida pública la haya tenido y habrá de conservar”, añadió.
Los comicios locales y federales más recientes ratificaron la decisión del grupo gobernante de mantener el poder a toda costa, puntualizó. Ante ello, un grupo de organizaciones y personalidades han definido los requisitos mínimos para que las elecciones de este año sean libres.
Al respecto, hizo una convocatoria a sumarse a ese proyecto. Aún es tiempo de salvar la democracia y salvarse del precipicio, condensó.
Al dar la bienvenida, el director de la Fundación Miguel Alemán, Alejandro Carrillo Castro, evocó los primeros encuentros de trabajo administrativo entre él y Muñoz Ledo, reflejados en el libro de Editorial Profmex Debate. Se trata de un ensayo biográfico, en el que los autores recogieron el testimonio del político, en un texto de casi mil páginas.
En su oportunidad, el periodista Ricardo Raphael recordó que el cambio político que propició Muñoz Ledo con otro grupo de disidentes antes de los comicios de 1988 fue dramático.
“En respuesta, la élite política los expulsó; ellos salieron a la calle y se dieron cuenta que su movimiento de opinión tenía un reflejo en la sociedad y que había una nueva mayoría social. Fue un suceso que no solo dividía a esa élite, sino que abrió los cauces de participación.
“Fue el principio del fin de régimen y Porfirio como testigo nos cuenta en el libro cómo murió, aunque sobrevino el fracaso del siguiente sistema político.
“Muñoz Ledo nos tiene que contar lo que vino después, algo que seguramente nos llevaría a reinterpretar nuestro presente. Una suerte de purgatorio entre el régimen que murió y el que todavía no comienza”, dijo el Raphael.
