Cada vez es más frecuente ver que empresas mexicanas del sector de la construcción utilicen materiales sustentables para el desarrollo de proyectos arquitectónicos
En la actualidad, existe una creciente preocupación de la sociedad por cuidar el medio ambiente. Cada vez es más frecuente ver que empresas mexicanas se suman a adquirir una consciencia de responsabilidad hacia su entorno, tal es el caso del sector de la construcción que utiliza materiales sustentables para el desarrollo de proyectos arquitectónicos.
Pero, ¿a qué nos referimos con una edificación sustentable? De acuerdo con datos obtenidos de ProMéxico, el término apunta a la “utilización de materiales ecológicos para la construcción y prácticas, respetando el ambiente”. Según datos oficiales, en México la vivienda tuvo un crecimiento de más del 85 por ciento entre los años 2007-2012, con un impacto en el consumo de energía y generando 77 por ciento de desechos sólidos, que resultan aproximadamente el 8 por ciento de las emisiones totales de dióxido de carbono (CO2) en el país.
Una de las organizaciones que ha decidido formar parte de la cultura Eco-friendly es Novidesa, de origen 100 por ciento mexicano, empresa que fabrica y comercializa sistemas constructivos innovadores, basados en el desarrollo y manufactura de paneles EPS (poliestireno expandido de alta densidad).
Entre sus características destacan el excelente aislamiento acústico y térmico, tanto en clima frío como cálido, favoreciendo interiores confortables para el usuario final, permiten ahorros significativos en el gasto de energía. Por otro lado, brindan al constructor grandes beneficios ya que gracias a la versatilidad y ligereza de los paneles se ahorra en los tiempos de construcción y mano de obra, todo esto bajo un estricto control de calidad.
Es así como surge la sinergia entre dicha empresa y un conjunto de despachos arquitectónicos. Quizá el caso más notable sea el de Sergio Orduña, quien por medio de su taller SOstudio, creó una residencia de playa ubicada en Cancún. Bajo la premisa de desarrollar proyectos de arquitectura e interiorismo desde un enfoque vanguardista y actual, Orduña plantea su compromiso con una innovación que aspira tanto a resolver necesidades, como a trascender a través de una propuesta de expresión y emoción de vivir los espacios donde nos desenvolvemos.
La casa “Pez Volador” rompe el paradigma del diseño al apostar por un proyecto deconstructivista y no convencional. A su vez, integra paneles del ya mencionado material en el entrepiso, fachadas y azotea, promoviendo un ahorro de energía eléctrica.
Proyectos como este, que se preocupan por su entorno, permiten que poco a poco se cree una cultura de responsabilidad con el medio ambiente, que permea a todos los que conforman nuestra sociedad. Dando como resultado la tan necesaria armonía entre la tecnología y la sustentabilidad.
Revista Protocolo
