Seguridad

Exponen inseguridad de autos nuevos fabricados en México

Tsuru es el único vehículo que no puede adaptarse a normas estrictas de seguridad, por lo cual se ha recomendado su salida del mercado

Exponen inseguridad de autos nuevos fabricados en MéxicoEl auto más vendido en México es expuesto colisionado a la entrada de la 2ª Conferencia Global de Alto Nivel en Seguridad Vial de Naciones Unidas que se realiza en Brasilia como muestra de la inseguridad de los autos fabricados sin los sistemas de seguridad que se requieren internacionalmente.

Delegados de todos los países participantes observan, al entrar a la Conferencia, las condiciones en que queda este vehículo como una muestra del peligro que representa para los conductores un auto inseguro.

El auto Aveo de la empresa General Motors exhibido a la entrada de la Conferencia Global fue fabricado en México y probado recientemente para evaluar su seguridad en situación de colisión por la organización Latin Ncap. El modelo calificó con cero estrellas destacándose que el mismo modelo Aveo que se vende en Europa alcanzó la máxima calificación de cinco estrellas en el año 2011.

Las pruebas de colisión se realizan a 64 kilómetros por hora con un impacto en el 40 por ciento del frente del vehículo. La diferencia entre cinco estrellas y cero estrellas es que en el primer caso la persona baja del auto caminando y en el segundo puede significar que la persona muera en la colisión o pueda sufrir un daño de por vida.

En la exposición realizada por los expertos de Global NCAP y Latin NCAP1 se señaló que un caso aún más grave entre los autos que se fabrican en México y se comercializan en algunos países de la región, es el del Nissan Tsuru que también ha sido probado obteniendo cero estrellas. El caso del Tsuru es de especial atención ya que es el único vehículo que no puede adaptarse a normas estrictas de seguridad, por lo cual se ha recomendado, desde hace años, su salida del mercado.

Con estos casos se señala que gran parte de los autos más vendidos en México no cuentan con las medidas de seguridad que recomienda Naciones Unidas y que no pueden ser comercializados en esas condiciones en Estados Unidos, Canadá, Europa, Ecuador, Argentina y Brasil. Cabe destacar que Nissan no ha hecho ninguna modificación a este popular modelo después de los resultados que salieron a la luz en 2011. Alrededor del 80 por ciento de la producción de automóviles en México cumple con los estándares de seguridad recomendados por Naciones Unidas y establecidos como obligatorios en varias naciones, sin embargo, estos vehículos son exportados manteniendo un doble estándar para los consumidores mexicanos y de algunos países de la región.

En la Conferencia se destacó que México es el único país, entre los grandes productores de autos, que no cuenta aún con una normatividad que regule la seguridad de los vehículos. Se señaló además que el actual proyecto de norma del gobierno, postergado desde 2013, otorgará cuatro años de gracia para la industria al momento de publicarse para que pueda incorporar los estándares especificados. Para infortunio de los mexicanos ni aun con dicha norma se asegura un estándar equivalente de seguridad a lo que se ha logrado en Ecuador, Brasil o Argentina.

En Ecuador se adoptaron desde el año pasado las Normas UNECE de Naciones Unidas, las cuales garantizan que los autos cumplan con los mejores estándares de seguridad. En tanto, en Brasil, desde 2009 es obligatorio que todos los vehículos que se comercialicen en este país tengan bolsas de aire y frenos ABS, sistema de retención infantil Isofix, cinturones de tres puntos y apoyacabezas. Posiblemente se logre en Brasil en 2016 que sea obligatorio el ESC2 en todos los autos nuevos, el cual se ha comprobado que después del cinturón de seguridad es lo que más salva vidas.

Desde Brasilia, Stephan Brodziak, investigador en seguridad vehicular de El Poder del Consumidor, declaró: “Los argumentos de la AMIA (Asociación Mexicana de la Industria Automotriz) para rechazar la incorporación de estos dispositivos de seguridad estriban en que el costo de los vehículos será más alto. Sin embargo, todos los especialistas coincidieron en que este es un argumento falso, muy utilizado por asociaciones de fabricantes de autos de algunos países para retrasar lo más posible la integración de dichas tecnologías.

“La experiencia internacional en economías emergentes, como la de México, ha demostrado que ésta es la estrategia más efectiva de los productores para evitar que los gobiernos exijan estándares más altos a la industria. Pero la realidad de los costos está muy lejos de lo que argumenta la industria. El costo por dispositivo por unidad en ABS y ESC (Sistema de Frenos Antibloqueo y Sistema de Control de Estabilidad) es de 100 dólares; AirBag (Módulo de bolsa de aire), 50 dólares. Además habría que considerar que estos son precios al menudeo. Si tomamos en cuenta que el Aveo vendió en un año cerca de 58 mil unidades, estos precios serían considerablemente menores. Lo anterior implicaría aumentos insignificantes en el precio para los consumidores. Y aunque no redujeran su costo, la diferencia que estos sistemas hacen en caso de colisión y para prevenir riesgos es tan alta que su inclusión no debería siquiera discutirse. La razón detrás del falso argumento de la industria es que si esta tecnología se convierte en un estándar en México la industria no podrá especular con el precio a su antojo con los autos que sí cuenten con estos dispositivos.”

En la Conferencia Global se destacó la urgencia de que México, como uno de los grandes productores de vehículos en el mundo, incorpore de manera urgente las regulaciones necesarias que puedan hacer posible los objetivos de la Década de Acción por la Seguridad Vial impulsados por Naciones Unidas, ya refrendados por el gobierno mexicano, entre los que está la meta de reducir la mortalidad por accidentes viales a la mitad.

Revista Protocolo

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