Brindan servicio a más de ocho mil alumnos en el continente americano y tienen presencia en 26 países
La empresa Big River es originaria de León, Guanajuato, y tiene presencia en más de 26 países. Se trata del desarrollo de una plataforma donde un usuario, estudiante o colaborador de una empresa toma cursos en línea con una tecnología que reduce el tiempo de aprendizaje y de inmediato puede ponerlo en práctica.
Con 15 años de experiencia en contenidos educativos, oferta cursos en línea en varias áreas con visión empresarial y no académica para entrenar de manera atractiva a miles de personas, reduce el tiempo de aprendizaje y logra aumentar la competitividad de los cursantes.
Los tres socios fundadores de la empresa desarrollaron el concepto cuando se dieron cuenta de la necesidad de los empresarios para capacitar a su equipo de trabajo, a bajo costo.
“En Big River exportamos conocimiento. El usuario, estudiante o colaborador de una empresa toma cursos en línea con una tecnología que reduce el tiempo de aprendizaje y de inmediato lo puede poner en práctica”, indica Ana María Godínez, socia fundadora de Big River International Progress Network.
Esta empresa mexicana tiene más de ocho mil alumnos en 26 países del continente americano, 800 compañías utilizan el desarrollo de contenido mediante el cual apoyan la capacitación de sus colaboradores.
Big River decidió hacer uso de la tecnología al ver cómo avanzaban los medios digitales, las compañías requerían mayor capacitación y contaban con poco presupuesto, entonces la solución que Big River propuso fue esta plataforma para que empresas capaciten al personal con calidad y a bajo costo.
La propuesta de esta empresa del Bajío es identificar cuál es el contenido requerido por la compañía o persona, diseñan un programa con módulos. Un especialista de Big River platica con el representante de la empresa interesada y desarrollan el contenido con una plataforma que estará disponible en línea.
Al respecto, Ana María Godínez señala: una vez que ambas partes se han puesto de acuerdo en el contenido, un equipo pedagógico integra el conocimiento y genera la plataforma de aprendizaje. Se incluyen evaluaciones, libros de trabajo para descargar, posters, diplomas, valoraciones y recursos para que el alumno adquiera el conocimiento.
En la plataforma hay un perfil para cada usuario que tome el curso. Como el curso es “casi” de manera personal, en cuanto el cursante aprieta play inicia la clase por medio de un video. “En ese video viene el objetivo, el libro de trabajo, tutorías con el experto, le puede mandar las dudas y los trabajos que se ha elaborado y la valoración.”
La empresa mexicana imparte cursos de planeación estratégica, certificación de calidad y de competencia, y sistemas de entrenamiento, entre muchos otros. “La tecnología es para todos los sectores, independientemente del número de personas que tomen el curso”, explica la emprendedora.
Este software-plataforma es un sistema que facilita la instrucción de las personas porque integra las mejores prácticas que hay en sistemas de aprendizaje en línea y que sea comprendido por el usuario.
De acuerdo con los desarrolladores de la plataforma, se ha comprobado que el alumno que toma un curso durante 15 minutos, se queda con el concepto clave. “Nos hemos especializado en ir directo a la herramienta y conocimiento para que el usuario de manera rápida lo implemente. Nuestros cursos tienen una visión empresarial y no académica.”
El equipo que desarrolló esta plataforma está integrado por ingenieros en sistemas, pedagogos, psicólogos, empresarios, diseñadores, expertos en edición para tener un uso correcto del lenguaje. Esta plataforma está patentada en Estados Unidos porque en México estos procesos no pueden patentarse. (Agencia ID)
Revista Protocolo
