La emblemática región francesa es una combinación de tradición, calidad, exclusividad y pasión. Tiene una de las 2 regiones vinícolas más grandes de Francia, sus viñedos están clasificados como Patrimonio Mundial de la UNESCO desde julio de 2015
Revista Protocolo
Recientemente la oficina de Turismo de Borgoña visitó México para presentar todos los encantos de esta región francesa. La Oficina de Turismo de Francia, Atout France, fue la anfitriona para recibir a Emmanuelle Hézard Hervieu, representante de turismo de Borgoña.
La mejor manera para presentar a Borgoña es a través de la gastronomía y el vino, pues es conocido que sus viñedos son excepcionales, además que el patrimonio transportará a paisajes únicos.
¿Por qué Borgoña es el lugar ideal para las próximas vacaciones? ¿Por qué Borgoña es la mejor opción para visitar?
Borgoña es una combinación de tradición, calidad, exclusividad y pasión; es una de las regiones más bellas en el continente europeo.
En esta región se puede consentir al paladar con cocina clásica o gourmet junto con sus 41 chefs con estrellas Michelin y especialidades como: estofado de res, huevos en meurette, gallo en salsa de vino amarillo y setas, así como los célebres caracoles.
En esta región de Francia se puede disfrutar de paisajes inolvidables con puestas de sol sobre los dorados viñedos en otoño, pequeños pueblos antiguos y típicos, colinas, lagos y canales; los recorridos por estas postales se pueden realizar en bicicleta, automóvil o incluso a través de los canales, pues Borgoña cuenta con la más importante red de vías navegables de Francia.
Francia es el país del buen vivir, Borgoña es la región que mejor representa esta frase, se encuentra la belleza a cada paso, así como en sus hoteles encantadores.
En cuanto a la arquitectura, Borgoña es un concentrado de toda la historia de la Edad Media en Europa: las abadías clasificadas conocidas en el mundo entero, iglesias y castillos, son un suspiro de historia en cada recorrido.
Pero si de vinos hablamos, Borgoña es una de las dos regiones vinícolas más grandes de Francia, sus viñedos están clasificados como Patrimonio Mundial de la UNESCO desde julio de 2015 y sus enólogos cultivan el arte de hospitalidad, además realizan degustaciones y fiestas de las vendimias.
La espiritualidad del cultivo de la vid, viene de su origen en esta región, ya que fueron los monjes quienes plantaron la vid en el siglo XI, desde ese entonces, Borgoña cuenta con una cultura del vino que ha pasado de generación en generación, la mayor parte de los viñedos de la región son familiares.
Recientemente las mujeres tienen un papel especial en los viñedos, la dedicación en su trabajo y las buenas prácticas ha dado un toque especial a este oficio que se ha vuelto más femenino. Las mujeres viticultoras fundaron el año 2000 la asociación “Mujeres y Vinos de Borgoña”. Ellas comparten una sensibilidad y acercamiento diferente de la vida en general y del vino en particular.
¡En Borgoña el arte de vivir a la francesa toma todo su significado!
