Comercio y Negocios

El embajador de Alemania dice adiós a México

Wolf-Ruthart Born, quien hasta mayo pasado se desempeñó como Embajador de Alemania en México, ofreció una amena y afectuosa reunión para despedirse de sus colegas y amigos mexicanos después de cuatro años de estar al frente de la sede diplomática de su país.

Con un emotivo discurso de despedida, Born se mostró agradecido con el país al que calificó de “gente encantadora” que habita en una de las capitales más grandes del mundo. El embajador manifestó también su regocijo por las buenas relaciones que durante su estancia estableció tanto con el expresidente Ernesto Zedillo y con el actual jefe del Ejecutivo, Vicente Fox, y su gabinete.

“En 1999 –recordó el embajador–, justo un día antes del “grito” de la Independencia mexicana (16 de septiembre) presenté mis cartas credenciales al entonces presidente Ernesto Zedillo Ponce de León. Y fue justo un día después cuando viví mi primer festejó en esta tierra y tomé mi primer tequila”.

“Muchas gracias a México y los amigos y a todos los representantes del ámbito político, cultural y de los medios de comunicación. México es un país incomparable, tuve la oportunidad de conocer gran parte de la República Mexicana, viajé de norte a sur y recorrí en cuatro años 50 mil kilómetros a bordo de un auto marca Volkswagen hecho en Puebla, México. Además tuve la oportunidad de tomar café en la conocida cafetería La Parroquia del puerto de Veracruz.”

Gracias a sus múltiples viajes por la República Mexicana, Born identificó segmentos para establecer negocios entre alemanes y mexicanos, pero también padeció algunos de los inconvenientes del asfalto y los “topes”. Al respecto, el diplomático recordó que en dos ocasiones los topes dejaron su huella sobre el automóvil.

Durante la estancia de Wolf-Ruthart Born las relaciones culturales entre México y Alemania aumentaron su intensidad. Muestra de ello es que en mayo se inauguró en Berlín una exposición sobre los aztecas, la cual registró la visita de más de 130 mil visitantes en una semana y anteriormente se presentó también con gran éxito en Londres y en un futuro se expondrá en Japón.

Asimismo, Alemania tendrá una participación especial en el Festival Cervantino que se celebra en octubre de cada año en Guanajuato, México.

Y en el aspecto económico Alemania es uno de los países con mayor presencia en México con más de 800 empresas de capital alemán asentadas en el país.

Wolf-Ruthart Born se despidió no sin antes anunciar la formalización de uno de los proyectos en el que invirtió mucho tiempo y gestiones para concretarlo: la construcción, a principios de 2004, de lo que serán las nuevas oficinas de la embajada alemana en México, las cuales se ubicarán en el antiguo terreno de la embajada de la Alemania Oriental.

Estas nuevas instalaciones, que estarán listas a principios de 2005, serán una muestra de la importancia que para Alemania tiene en la actualidad su relación con México.
Al concluir su discurso, Born solicitó a los presentes depositar en su sucesor la misma confianza que tuvieron con él y su esposa Valeria.

Y anunció que el nuevo embajador de Alemania en México es Eberhard Kölsch, diplomático de carrera, que hasta hace poco ocupó la posición número dos en la embajada de Alemania en Washington, DC.

La revista Protocolo extiende una cordial felicitación a Wolf-Ruthart Born por su destacada misión en México y desea la mejor de las suertes al diplomático y su distinguida esposa, quienes inician una nueva misión diplomática en Ankara, Turquía.

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