Cultura

Aplicaciones digitales ayudan a preservar patrimonio indígena

Son de mi corazón, app sobre el Son Jarocho y el Fandango, libro fotográfico digital en forma de app

Aplicaciones digitales ayudan a preservar patrimonio indígenaEn busca de preservar el patrimonio inmaterial y rescatar las lenguas y tradiciones de los pueblos indígenas para perpetuar su continuidad en el tiempo y que este conocimiento llegue a públicos más extensos, promotores culturales y especialistas en distintas materias tanto académicas como digitales unen esfuerzos y pluralizan la información a través de los nuevos recursos digitales, en el marco del II Congreso Internacional el Patrimonio Cultural y las Nuevas Tecnologías, en la mesa Conocimiento indígena y el uso de recursos digitales.

Ejemplo de ello es el proyecto de Nezahualcóyotl López López, estudiante de la carrera de ingeniería en sistemas computacionales del Instituto Tecnológico de Tlaxiaco (ITT) de Oaxaca, y desarrollador, quien en 2014 presentó una aplicación (app) para aprender mixteco denominada Tunchákua, ejecutable en Windows Phone y disponible en las tiendas de Microsoft, por medio de Media Player de forma gratuita.

Para este joven de 22 años, dicha iniciativa surge al querer que esta lengua indígena se pueda escuchar en el futuro y que gente interesada pueda aprender este idioma en educación básica.

Nezahualcóyotl es originario de la comunidad de Santa María Yucuhiti perteneciente al distrito de Tlaxiaco, donde se habla mixteco como lengua materna. De acuerdo con el catálogo de lenguas indígenas nacionales, en México existen 68 agrupaciones lingüísticas con 364 variantes. La preocupación del joven radica en que 21 lenguas nativas están en peligro de extinción.

En Oaxaca los idiomas ixcateco, zoque y chontal están en esta misma situación. Los hablantes de la lengua mixteca son más de 420 mil.

Por tal motivo desarrolló esta app que busca preservar el mixteco y quizá se puedan unir otras variantes, dependiendo de su impacto. Tunchákua, detalló, contiene vocabulario básico del mixteco del suroeste de Oaxaca, y a través de una interfaz sencilla, se pueden conocer datos interesantes de la región así como números, palabras básicas, su escritura y su pronunciación, ya que la app contiene un audio para tener un acercamiento de cómo se escucha el idioma.

El siguiente paso será lanzarla a final de año a plataformas Android; además de estar centrado en la traducción del navegador web de Mozilla México para que todo el navegador web sea en mixteco. De 2014 a la fecha, Tunchákua cuenta con 180 descargas, de las cuales en México se contabilizan 117, en Estados Unidos 16, Argentina dos y Reino Unido una, por mencionar algunas.

Otra forma de divulgación cultural es la propuesta Son de mi corazón, app sobre el Son Jarocho y el Fandango, del fotógrafo Rodolfo Candelas, un libro fotográfico digital en forma de app, de descarga gratuita en App Store como “Son de mi Corazón

Contiene 106 fotografías a color tomadas por él mismo y constituye un viaje visual y sonoro por la región cultural del Sotavento integrada por Tabasco, Veracruz y Oaxaca, dio a conocer en la mesa Patrimonio Inmaterial.

Al entrar a la app, comienza por el entorno natural en el que esta tradición musical se origina, pasando por los diferentes ambientes tanto rurales como urbanos en donde los músicos que la crean y recrean llevan a cabo sus vidas.

Posteriormente, continúa por los espacios rituales y festivos en los que esta música participa, para culminar en la fiesta del fandango, donde alrededor de una tarima convergen las diferentes expresiones culturales de las que el son funge como eje articulador, así la danza, la poesía, la comida, indumentaria y la arquitectura vernácula, reúnen dando sentido e identidad a la vida de quienes participan en el fandango.

Las imágenes de Son de mi corazón, app sobre el Son Jarocho y el Fandango, están acompañadas del ambiente sonoro, música, poesía y relatos relacionados al son jarocho; además contiene textos del cronista Antonio García de León y Álvaro Alcántara (historiador y músico integrante de Chéjere).

A lo largo de siete años, Rodolfo Candelas capturó con su cámara lo que veía, como una forma de entender lo que vivía y presenciaba. Con un colega de profesión, idearon hacer una colección sobre libros de fotografía, los primeros en México en forma de aplicación digital. Y así nació la Colección Cristal de Luz.

El objetivo es coadyuvar en la difusión de la fotografía mexicana a partir del uso de nuevas tecnologías.

Hasta el momento cuenta con cuatro ediciones: Sierra Zapoteca, de Jorge Lépez Vela; Tepito, el barrio, de Adriana Zehbrauskas; Son de mi Corazón, de Rodolfo Candelas Castañeda (publicación apoyada por el Instituto Veracruzano de la Cultura), y La ciudad de México, de Marco Antonio Cruz (con apoyo del Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales del Fonca del Conaculta); todas estas apps se pueden descargar desde esta aplicación.

A la fecha cuenta con más de dos mil 600 descargas en países de los cinco continentes. Surge en 2013 y fue uno de los primeros libros fotográficos del mundo y el segundo en el país de este género.

Revista Protocolo

Palabras clave

Países que nos están viendo

ALIANZAS