Participó como solista invitado el pianista Jorge Federico Osorio, quien festejó medio siglo de carrera artística
La Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY), bajo la dirección de Juan Carlos Lomónaco, celebró su primera década de vida con un concierto gratuito en el Palacio de Bellas Artes.
El virtuosismo y entrega de los 63 músicos que integran a la OSY quedaron manifestados desde el inicio de la velada musical con la ejecución, junto con el pianista Jorge Federico Osorio, del Concierto para piano número 5, Emperador, de Ludwig van Beethoven, obra monumental cuya partitura está dedicada al archiduque Rodolfo de Austria, mecenas del compositor alemán.
El pianista, quien cumple 50 años de trayectoria, tocó acompañado por la agrupación los tres movimientos de la obra Allegro, Adagio un poco mosso y Rondo: allegro, con los que mostró su maestría y dominio del instrumento arrancando vítores y largas ovaciones de los asistentes que llenaron la Sala Principal del coloso de mármol.
Para la segunda parte del concierto la OSY, que en sus diez años de trabajo ha alcanzado un nivel de excelencia y consolidación como una de las mejores del país, interpretó la Sinfonía número 1, Titán, de Gustav Mahler.
La pieza, una de las más apreciadas del compositor austriaco y cuyo título alude a la novela homónima de Jean Paul, fue apreciada por los asistentes en sus cinco movimientos: Lento, como un sonido de la naturaleza; scherzo, poderosamente agitado, pero no tan rápido; marcha fúnebre: solemne y mesurado; y tormentosamente agitado.
Durante los 53 minutos que la pieza fue interpretada, los espectadores fueron testigos de la calidad técnica y de ejecución de los músicos que integran la Orquesta Sinfónica de Yucatán, destacando en conjunto y por instrumento: violines, violas, violoncelos, contrabajos, flautas, oboes, clarinetes, fagotes, cornos, trompetas, trombones, tuba, arpa o las percusiones.
Al término de la ejecución, el público manifestó su agradecimiento a la orquesta con una ovación de pie, haciéndole un reconocimiento al director artístico Juan Carlos Lomónaco, quien regresó en varias ocasiones ante el clamor de los asistentes y cuyas palmas arrancaron la sonrisa de los instrumentistas.
Cabe señalar que la Orquesta Sinfónica de Yucatán debutó el 27 de febrero de 2004 en el Teatro Peón Contreras de Mérida. Su primera producción discográfica se editó en septiembre de 2014 como parte de los festejos por su décimo aniversario.
La agrupación realiza dos temporadas al año con más de 50 presentaciones, en las que participan directores y artistas locales, nacionales e internacionales. Entre los conciertos que ha brindado sobresalen el de las Mil Columnas en Chichén Itzá, Yucatán (2008); el de la Pirámide, en el mismo escenario, con Sarah Brightman (2009); con el tenor mexicano Fernando de la Mora y los Niños Cantores de Viena (2009), y con Filippa Giordano en el Teatro Peón Contreras (2011).
Revista Protocolo
