El despertar de la Fuerza, hace una correcta mezcla de nuevos elementos y nostalgia
Disney ha entregado un capítulo sumamente satisfactorio en su primera producción de Star Wars, que engloba el pasado y que sienta las bases para un desarrollo interesante de sus nuevos protagonistas y, claro, antagonistas, asegura la revista mexicana especializada Cine Premiere.
“Las bases para el futuro son sólidas con este capítulo, cosa que ni el creador George Lucas pudo lograr”, dice en su editorial de diciembre Carlos Gómez Iniesta, director de marca de Cine Premiere.
El destino se alinea para que una chatarrera se tope con un extracto del mapa que amenaza la estabilidad de la Nueva Orden, organización con referencias nazistas —matanzas, iconografía, tiranos— que representa el resurgimiento de lo que en los episodios anteriores de Star Wars era conocido como el Imperio Galáctico, describe el experto.
Hay una súper arma que destruye planetas enteros y un villano con el rostro cubierto por un casco negro y voz grave (Kylo Ren, certeramente interpretado por Adam Driver), que además sigue las órdenes de un maestro más avezado en las artes oscuras, Snoke (actuado digitalmente por Andy Serkis). Ah, y otro droide con un mensaje sumamente importante: la joven en cuestión, Rey (Daisy Ridley), está a punto de descubrir que tiene un poder más grande de lo que ella misma podía soñar.
El despertar de la Fuerza, hace una correcta mezcla de nuevos elementos y nostalgia de lo que se entregó en la trilogía de 1977 a 1983.
Como lo ha hecho el director JJ Abrams con otras sagas célebres —es casi inconcebible que, de sus cinco largometrajes, sólo uno esté fuera de alguna franquicia—, afirma Gómez Iniesta.
Abrams ha logrado en esta ocasión un producto comercial, moderno y que debe satisfacer a la gran mayoría de sus antiguos seguidores, además de atraer a nuevas generaciones, que por primera vez verán una cinta original de SW en el cine.
Parte del éxito que ha caracterizado a este cineasta influyente es, sí, actualizar las historias, pero mantener un respeto por los icónicos personajes.
Dicho respeto por el pasado y esencia de la franquicia también se podría ampliar a la técnica de filmación usada por Abrams, que claramente marca diferencia respecto a la estridencia de los episodios I al III y su abuso digital.
Punto extra al bosque nevado —ese duelo no sólo es interesante visualmente, su diseño sonoro es único, con sables de luz y copos arremolinados (diseñado por David Acord, quien también fue parte de Guardianes de la Galaxia y Star Trek), concluye el editorial de Cine Premiere.
Revista Protocolo
