Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán
Los aplausos y ovaciones de pie que por su magnífica actuación recibió la bailarina Elisa Carrillo Cabrera en la función Gala de estrellas. Elisa Carrillo y sus amigos no solo quedaron en el abarrotado Auditorio Nacional, los halagos y aclamaciones continuaron en la terraza de un hotel del Centro Histórico de la Ciudad de México, donde al término de la presentación en el coloso de Reforma, se le realizó un homenaje.
Convocadas por el Patronato de la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM), presidido por el empresario Heberto Guzmán, más de 200 personas, entre las que destacaron el escultor Enrique Carbajal González “Sebastián” y la fotógrafa Susana Orozco, reconocieron la trayectoria de la danzante nacida en Texcoco, Edomex, en el año 1981, y más por haber recibido el pasado 21 de mayo el premio Benois como la mejor bailarina de 2019, gracias a su participación con el Ballet Estatal de Berlín en el montaje de la historia Romeo y Julieta de la que fue la protagonista principal.
A pregunta hecha por Protocolo Foreign Affairs & Lifestyle en una entrevista exclusiva, se le cuestionó si pesa el ser la mejor bailarina del mundo.
“Yo honestamente no voy a decir si soy la mejor bailarina del mundo porque para mí ese título no existe. Yo creo que hay muchos buenos bailarines, yo me siento honrada de formar parte de uno de los ballets más reconocidos del mundo (Ballet Estatal de Berlín). Gané el premio a la mejor bailarina de este año en el Benois de la Danse, pero para mí hay muchos bailarines que se pueden ganar este premio también.”
Desde el año pasado (2018) el mundo de la danza volteó hacia México cuando el tapatío Isaac Hernández obtuvo el mismo premio como mejor bailarín, a lo que Elisa dijo: “¡Qué bendición que ambos hayamos podido lograr esto! Y bueno, Dios quiera que esto siga”, así como no descartó el bailar juntos en algún proyecto.
Mientras continúa cumpliendo con sus compromisos por el mundo, Elisa permanecerá impulsando la difusión, educación y desarrollo de la danza mexicana en los ámbitos nacional e internacional, a través de su fundación que lleva su nombre.
Durante la velada, la Mejor Bailarina de 2019 fue celebrada con bocadillos y bebidas, así como un mariachi que le interpretó diversas canciones mexicanas.
