Cultura

David Bowie resucita en la CDMX

Muestran fotografías nunca antes vistas del “Rey Camaleón”, 40 imágenes de Brian Duffy que estarán exhibidas hasta finales de febrero de 2017 en el Museo de la CDMX

Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán

Johan Graffman y Julián Acosta, representantes en México de BLK MRKT
Johan Graffman y Julián Acosta, representantes en México de BLK MRKT

Ni cuando se presentó por primera y única vez en octubre de 1997 en el Foro Sol de la Ciudad de México (CDMX), David Bowie estuvo tanto en la intimidad con sus fanáticos mexicanos, como ahora.

El cantante londinense, ícono mundial de la música rock-pop, fallecido el pasado enero, resucita en más de 40 fotografías inéditas, que muestran una faceta de Bowie más allá de los escenarios y las pantallas de televisión.

Los procesos que llevaron a los resultados de las portadas de los emblemáticos álbumes Ziggy Stardust, Scary Monsters y Aladdin Sane, esta última considerada en el mundo como una de las portadas más importantes en cuanto a discos de rock se refiere; así como las sesiones tituladas Thin White Duke y Lodger, capturadas en la lente del célebre fotógrafo inglés Brian Duffy; desde hace unos días, se aprecian en su totalidad en el Museo de la CDMX (José María Pino Suárez 30, Centro Histórico) con la exposición Duffy/Bowie que le ha dado la vuelta al mundo y estarán exhibidas hasta finales de febrero de 2017.

Traída a la CDMX por la marca británica BLK MRKT (Black Market), dedicada a la promoción del rock y con el apoyo de la Secretaría de Cultura de la CDMX, la entrada tiene un costo de 29 pesos, con descuentos a estudiantes, maestros e INAPAM con credencial.

Más allá de la imagen de andrógino, extraterrestre y bisexual, que lo llevaron a recibir el apodo de “Rey Camaleón”, Duffy/Bowie busca mostrar una cara aún más personal en el artista, que también brilló en la pantalla grande con varias películas: la del ser humano, por lo que quien acuda, verá al ídolo en su papel de hogareño, esposo y hasta padre de familia.

Revista Protocolo