En los últimos años el intercambio comercial entre México y China se ha incrementando rápidamente. En 1998 los negocios bilaterales entre ambas naciones sumaron 600 millones de dólares; para 1999, la cifra aumentó a 800 millones, y en 2000 ascendió a mil 800 millones, señala Yu Xian Chen, consejero económico y comercial de la embajada de la República Popular de China en México.
Sobre la reciente visita del presidente mexicano Vicente Fox a territorio chino, el diplomático afirmó que es un asunto importante tanto para China como para México, ya que tienen un fuerte potencial en los mercados internacionales. Consideró que a raíz del encuentro entre los mandatarios de ambos países se podrán desarrollar o estimular las relaciones diplomáticas, comerciales y económicas, por lo que «tenemos buenas perspectivas» sobre éstas.
En entrevista con Protocolo, Yu Xian Chen precisó que las exportaciones mexicanas hacia el país oriental han sido crecientes. En 1998 éstas fueron de 100 millones de dólares; en 1999 sumaron 160 millones de dólares y el año pasado alcanzaron casi 500 millones de dólares.
De enero a abril del presente año el comercio bilateral entre México y China aumentó en forma significativa, ya que se ubicó en 700 millones de dólares –las exportaciones mexicanas hacia la nación china en este periodo fueron de 230 millones de dólares–. Lo anterior, explicó el diplomático, representa un aumento de casi 100 por ciento en relación con el mismo periodo del año previo.
Economías complementarias
México y China son países cuyas economías se han desarrollado rápidamente en comparación con otras. Los productos de las dos partes resultan complementarios, por lo que podemos hacer buenos negocios bilaterales, recalcó Yu Xian Chen.
Por el lado mexicano destacan las exportaciones de maquinaria y artículos electrónicos, que en los últimos años representaron 50 por ciento de las ventas totales hacia esa nación. Por su parte, el país oriental tiene presencia en México con productos textiles, maquinaria agrícola y calzado.
Las inversiones chinas en tierra mexicana aumentaron en los dos últimos años y actualmente suman alrededor de 200 millones de dólares.
Además del área textil, China tiene mucho interés en invertir en industria ligera y en productos electrónicos, especialmente electrodomésticos. También pretende establecer algunas fábricas de bicicletas.
En Sonora, por ejemplo, se construyó una industria textil con inversión china, que fue inaugurada recientemente por el presidente Vicente Fox. Su capacidad de producción es de 100 mil husos de hileros.
El consejero económico y comercial de la embajada China señaló que aunque empezaron a hacer inversiones en el área textil de México, «sabemos que es sólo el inicio y nosotros queremos tener más contactos para realizar una cooperación profunda con algunas fábricas textiles mexicanas».
Comentó que de acuerdo con investigaciones propias realizadas en México, han observado que cierta maquinaria textil está «bastante atrasada y se necesitan hacer transformaciones técnicas».
En Puebla, por ejemplo, hay entre 300 y 400 fábricas textiles pequeñas y medianas. En la maquinaria de esas industrias no se ha hecho cambio técnico alguno, por lo que la calidad de sus productos no es muy buena y no compiten en forma fuerte en el mercado internacional. «Si nosotros hacemos inversiones fuertes para cooperar con esas fábricas, se podrá mejorar la calidad y aumentar su competencia en el mercado nacional e internacional», confía Yu Xian Chen.
Sector agrícola
El diplomático anotó que China es un país agrícola importante en el mundo, por lo que tiene algunas ventajas en productos de este sector, «nuestro gobierno pone mucha atención para realizar inversiones en el área agrícola de México».
De hecho, existe un proyecto importante para producir tractores en Guadalajara, Jalisco, con una inversión de 20 millones de dólares. Otro proyecto agrícola se estableció en Campeche para el cultivo de arroz, frutas y verduras.
En la actualidad algunas compañías chinas están interesadas en establecer relaciones de cooperación con México para el cultivo de frutas y verduras, incluso en el área agroindustrial.
En calzado, China pretende «hacer cooperaciones recíprocas» con productores de León, Guanajuato, ya que algunas materias primas son importadas del país oriental y tienen «buena calidad de cuero», según el representante chino en nuestro país.
De igual manera, refirió que algunas compañías chinas ponen mucha atención para realizar investigación en México, por ejemplo en procesamiento de madera y en la agroindustria, para posteriormente hacer proyectos de inversión.
China y la OMC
Respecto del interés de China por ingresar a la OMC, Yu Xian Chen mencionó que es importante y no sólo es favorable para su país, sino para otras naciones, ya que sus productos, incluidos los mexicanos, podrán ingresar fácilmente al mercado chino con bajos impuestos y viceversa.
Sobre la postura de Vicente Fox de no oponerse al ingreso de China a la OMC, el diplomático dijo que «ante todo debemos dar muchas gracias por la actitud sostenida por Fox y el gobierno de México de apoyar el ingreso de China a la OMC».
En relación con la posibilidad de establecer un acuerdo comercial entre China y México, manifestó que la parte mexicana todavía sostiene una actitud precavida, dicen necesitar un lapso de transición –entre 12 y 15 años– en la política de cuotas compensatorias para algunos productos chinos. «Eso no es una política correcta para el resto del mundo», remarcó.
¿Tiene interés China en establecer un acuerdo comercial similar al que ha firmado México con otros países?
Después de que nuestro país ingrese a la Organización Mundial de Comercio, entonces podremos buscar una oportunidad para establecer un acuerdo comercial con México.
Asuntos por resolver
El consejero económico y comercial de la embajada China aseveró que aunque las relaciones se han desarrollado sanamente, todavía quedan algunos problemas que deben resolverse.
En este sentido, consideró que la política por parte de México de cobrar cuotas compensatorias a algunos productos textiles, vestido y juguetes chinos genera una competencia desigual, ya que a los mismos artículos procedentes de otros países no se les aplica cobro e ingresan sin limitaciones.
Los empresarios chinos –apuntó el diplomático– quisieran más flexibilidad, necesitamos una política de igualdad en la competencia en todas las áreas. «Si esto se concreta, quizá un mayor número de productos chinos puedan entrar en los mercados mexicanos y las compañías chinas tendrán más interés en importar productos mexicanos.»
Al cuestionársele sobre la oposición de productores mexicanos al contrabando de mercancías de origen chino que ingresa a México, el diplomático expuso que de acuerdo con sus investigaciones «todavía no encontramos a los empresarios chinos que contrabandean productos para exportar en el mercado de México. Sabemos que algunos importadores asiáticos, incluyendo a comerciantes de Taiwán, compran productos chinos a bajo precio y luego se exportan al mercado de México. No se puede decir que los empresarios, comerciantes o exportadores chinos realicen contrabando para el mercado mexicano».
Según estadísticas de Bancomext el intercambio bilateral en el año 2000 fue de dos mil 800 millones de dólares; sin embargo, una estadística de la aduana general china indica que fue de mil 300 millones. Hay una gran diferencia entre las dos partes, anotó Yu Xian Chen, y refirió que alguna parte de la exportación de China hacia México fue realizada por varios exportadores de Taiwán y de otros productores asiáticos. Aseguró que en los últimos meses algunas aduanas mexicanas han revisado contenedores de China, pero no han encontrado anomalías ni problemas de contrabando.
Explicó que algunos productos de su país registran precios bajos, por el reducido costo de sus materias primas y los bajos salarios en China.
Por último, Yu Xian Chen dijo que hay una visión optimista para resolver estos problemas de antaño entre China y México e insistió en que «tenemos fuerte potencial para el desarrollo económico y comercial, nos necesitamos mutuamente para hacer negocios bilaterales. Se puede decir que tendremos buen futuro en los negocios comerciales».
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