Enclavado en la colonia Polanco de la ciudad de México, está Jaso, un restaurante creado por dos chefs que además son esposos. Sonia y Jared se conocieron cuando estudiaban en el Culinary Institute of America, en Hyde Park, Nueva York; además de su amor compartieron el gusto por trabajar juntos y en el año 2006 crearon Jaso, un restaurante bar súper exclusivo y con un ambiente muy sofisticado.
Ana Fabiola Ramos Castillo
Jared se encarga de los platos fuertes (foie-gras con salsa de higo, brocheta de pato y una selección infinita de carnes y pescados) y Sonia de la repostería (ella hace desde la mantequilla, hasta los helados y pasteles).
Jaso ofrece un concepto de cocina moderna americana, 100 por ciento artesanal. Desde la entrada se nota lo original de su diseño, pues un gran tronco es lo primero que aparece a la vista, e inmediatamente después, el resto del salón que se descubre como un espacio que mezcla detalles tanto modernos como clásicos, con materiales como madera, mármol y acero.
Jaso divide sus dos niveles y su terraza en diferentes ambientes: una zona lounge, un comedor principal, una elegante barra y terraza al aire libre.
La cocina, el corazón de Jaso, es donde Jared y Sonia preparan los platillos que se sirven. La filosofía de la cocina de Jaso consiste en la preparación meticulosa de productos frescos.
Entre los platillos que Jared prepara se encuentran el salmón del Atlántico y escolar en dashimoto, soya glaseada, ensalada de aguacate con pepino y ralladura de daikon; costilla y lomo de cordero de Nueva Zelanda, con pedacitos de hombro de cordero cocido lentamente por 22 horas, servido con cous cous, fruta seca y colecitas de Bruselas en salsa de oporto.
Por su parte, Sonia prepara deliciosos postres como el lingurian blueberry cake con delicadas láminas de miel y helado de panal de abeja, una degustación de quesos del mundo entero o un exquisito mousse de chocolate blanco, crujiente merengue francés acompañado de salsa frambuesa, pistaches tostados y helado de chocolate blanco.
Tanto el menú de platillos y el de postres son gourmet, originales y ampliamente recomendables. Y ni qué decir de la carta de vinos. Jaso cuenta con una cava de cristal, enmarcada en un cubo de madera que alberga vinos del viejo y nuevo mundo, con gran enfoque en etiquetas contemporáneas.
Los chefs seleccionan cuidadosamente los vinos para ofrecer una extensa variedad de alternativas. Al tener más de 400 etiquetas del mundo entero permite crear maridajes perfectos tanto para los menús de degustación como a la carta.
Jaso es la perfecta combinación de lo tradicional con lo moderno. Un lugar muy acogedor que estimula los sentidos: el visual, el auditivo, el táctil y finalmente, el del gusto.
Su filosofía es recibir a gente que sabe lo que busca y come, que va y disfrutar de una experiencia completa en esta suerte de “spa culinario”.
Para mayores informes: http://www.jaso.com.mx www.jaso.com.mx
Revista Protocolo
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