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La historia detrás del nombre de “el caballito”

El nombre con el que se conoce al vaso icónico e ideal para tomar tequila, tiene su origen en el siglo XIX

Revista Protocolo

Ciudad de México, 14 de enero de 2021.— Cada elemento relacionado con el tequila tiene su propia historia. En esta ocasión se sabrá un poco de su inigualable compañero, con el cual la bebida alcohólica mexicana por excelencia ha recorrido parte de su camino: el “caballito” tequilero.

Desde los años setenta del siglo pasado se creó la versión más famosa de este vaso como actualmente se conoce, elaborado en vidrio y forma cónica, cuya ligera angulación hace que la boca sea más grande que la base, la cual es de un amplio grosor que permite su equilibrio y cuenta con una capacidad de 30 ml, aunque puede ser de hasta 60 ml.

Clásico de la cristalería mexicana, tiene sus orígenes en el siglo XIX, periodo en el que Casa Herradura se registró como hacienda tequilera.

De acuerdo con la Academia Mexicana del Tequila, se le da el nombre de “caballito” porque los hacendados de la época montaban a caballo para supervisar el trabajo en los campos de agave, durante su recorrido llevaban un itacate y dos guajes, uno que contenía agua y el otro tequila.

Para disfrutar este último, utilizaban un cuerno de bovino, el cual era recortado y limpiado perfectamente en su interior para formar un pequeño recipiente que se colgaba en el cuello con un lazo de ixtle, y así lo bebían de un solo trago. Esta pelicular manera de degustarlo era característica de la época, y la respuesta más común a esta costumbre era “Es pa’l tequila en el caballito”.

Aunque aún no se sabe quién fue el creador del caballito, siempre será el complemento inseparable, que con el paso de los años ha tenido modificaciones estéticas de acuerdo a su fabricante y hasta otro nombre, conociéndolo como shot en mercados internacionales.

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