Con motivo de la prueba nuclear efectuada por Corea del Norte el pasado 9 de octubre, numerosas naciones han manifestado su oposición ante este hecho.
La posición del gobierno mexicano fue dada a conocer mediante un comunicado emitido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) donde se pone de manifiesto que México condena y deplora este acto que es contrario a los propósitos del desarme y la no proliferación nucleares, y promueve mayor tensión en la península de Corea.
Los ensayos nucleares deben cesar para siempre a fin de no desencadenar una nueva carrera armamentista nuclear internacional. Así lo ha señalado México repetidamente en las Naciones Unidas, en cuyo marco se han adoptado numerosas resoluciones sobre la materia, señala el comunicado.
México continuará pugnando, incluso en el marco de reforma actual de las Naciones Unidas, por el desarme nuclear y por medidas eficaces y progresivas que aseguren la credibilidad y eficacia del régimen internacional de no proliferación nuclear en todos sus aspectos.
México insta a la República Popular Democrática de Corea para que solucione la cuestión de la seguridad en la región por la vía diplomática, en el marco de las Pláticas de las Seis Partes, y se mantendrá atento a las discusiones en el seno del Consejo de Seguridad sobre este asunto.
Posición alemana
Por su parte, el ministro federal de Relaciones Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, realizó las siguientes declaraciones en Berlín:
“El gobierno federal condena enérgicamente la prueba nuclear llevada a cabo en Corea del Norte. Con esta acción, el gobierno norcoreano prosigue su camino equivocado hacia el autoaislamiento. Instamos al gobierno de Corea del Norte a que abandone sin demora su programa nuclear y de misiles y a que no efectúe más ensayos.
“La prueba nuclear de hoy (9 de octubre) pone en peligro la paz y la seguridad en la región y más allá de la región. En virtud de sus obligaciones derivadas de la Carta de las Naciones Unidas, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tiene ahora el deber de responder de forma decidida a esta provocación de Corea del Norte.
“Los objetivos perseguidos por el gobierno norcoreano sólo pueden alcanzarse por la vía del diálogo. Por ello, el gobierno federal y la comunidad internacional esperan que Corea del Norte reanude inmediatamente las conversaciones a seis bandas.
“Alemania apoyará en la medida de lo posible todos los esfuerzos que contribuyan a resolver de forma pacífica esta tensa situación y a salvaguardar la paz y la estabilidad. El objetivo sigue siendo una península coreana libre de armas nucleares.”
Francia
La respuesta de Francia no se hizo esperar y el país galo manifestó su deseo de que el Consejo de Seguridad de la ONU aumente “lo antes posible” sus sanciones contra Corea del Norte, tras el ensayo nuclear realizado por el gobierno de Pyongyang.
Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia declaró a la agencia AFP que “en la resolución 1695 que fue adoptada en julio hay un cierto número de disposiciones sobre la cesión de bienes y tecnologías sensibles y transferencia financieras”.
Según él, Francia considera que hay que “consolidar estas disposiciones, y darles un valor jurídico obligatorio, algo que no ocurre en la resolución 1695. Y en esa dirección estamos reflexionando con nuestros socios regionales y con la comunidad internacional”.
Con esta actitud, Francia desea “presionar” a Pyongyang para que acepte de nuevo conversar dentro del Grupo de los Seis (Estados Unidos, China, Japón, Rusia y las dos Coreas) sobre la cuestión nuclear. Francia, miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, no tiene relaciones diplomáticas con el régimen de Pyongyang.
Corea del Norte anunció el lunes que realizó una prueba nuclear inédita, que terminó con éxito y sin ninguna emisión radiactiva, un acto que mereció una severa condena internacional y que fue celebrado como una proeza en Pyongyang.
Revista Protocolo
