Internacional

Crean Agencia Británica contra el Crimen Organizado

La embajada británica en México informó recientemente sobre la creación de una Agencia Británica contra el Crimen Organizado. La SOCA es un nuevo organismo de seguridad de amplias facultades creado por la Ley de Policía y Crimen Organizado de 2005. Reúne a más de cuatro mil personas provenientes de la Brigada Nacional contra el Crimen, el Servicio Nacional de Inteligencia Criminal, la Administración de Aduanas e Ingresos Públicos y el Servicio de Inmigración del Reino Unido. Sus facultades, modo de trabajo y misión lo hacen único en su tipo. Comenzó a funcionar oficialmente el 1 de abril de 2006.

La SOCA es un organismo esencialmente de inteligencia, con poder de policía y responsabilidad de minimizar daños. La palabra “daños” en este contexto significa el perjuicio ocasionado a las personas y las comunidades por el crimen organizado. Se trata de un concepto complejo y un reto que resulta difícil de cuantificar de manera convencional. Permite orientar a la SOCA hacia su tarea, que es marcar una diferencia en beneficio de las comunidades británicas a través de su labor.

La SOCA fue creada para combatir al crimen organizado, que abarca tráfico de drogas, tráfico de personas, fraudes, lavado de dinero, etc., y para dar apoyo especializado a la policía y otros organismos. Se encargará de transformar al Reino Unido en territorio hostil para el crimen organizado, y para ello buscará:

a. Ampliar considerablemente el panorama de inteligencia, con el objeto de determinar dónde, cuándo y cómo actuar para obtener el mejor resultado.
b. Fiscalizar los activos de la delincuencia.
c. Perseguir a los principales delincuentes y grupos delictivos más para someterlos a proceso penal y otras medidas.

Debido a las características del blanco al que apunta y a las técnicas que utilizará, la SOCA mantendrá un perfil público bajo y con frecuencia actuará en conjunto con otros o por medio de otros para dirigir ataques coordinados sobre los principales delincuentes y redes delictivas. Pero se trata de un organismo ejecutivo por derecho propio y actuará en forma directa. La SOCA también tendrá un perfil bajo en los medios, pero siempre procurará dar cuenta de su trabajo a organismos colaboradores y al público en general.

La SOCA estará regida por una Junta con mayoría de miembros no ejecutivos y administrada en su labor cotidiana por un director general, Bill Hughes. La SOCA dependerá del Ministerio del Interior, el cual fijará sus prioridades estratégicas.

Si bien la SOCA buscará reflejar su impacto en el primer año de trabajo, cambiarle las condiciones al crimen organizado en el Reino Unido llevará tiempo. De aquí a 2009, el éxito de la SOCA se reflejará en lo siguiente:

1. Muestras de que sus operaciones reducen el daño provocado por el crimen organizado.
2. Muestras de su capacidad para desarticular mercados criminales y de que los delincuentes consideran al Reino Unido un lugar menos atractivo para su actividad.
3. Mayor información y conocimiento.

Un mayor índice de recuperación de activos de la delincuencia y una vigilancia de por vida sobre los delincuentes peligrosos.

Revista Protocolo