Internacional

Italia y México

Amistad y cercanía que fomentan el desarrollo

Italy and Mexico A mutual friendship that fosters development

Entre Italia y México existe una larga tradición de profunda amistad y cercanía. Los sólidos lazos que unen a estos países se fortalecen con una relación bilateral en continuo crecimiento, particularmente en los ámbitos político, económico y cultural.

Aunque las relaciones diplomáticas entre Italia y México iniciaron en 1872 —con la acreditación del primer cónsul general y encargado de Negocios del reino de Italia en México— fue hasta el 1 de julio de 1946, después de la Segunda Guerra Mundial, cuando ambas naciones restablecieron relaciones y elevaron sus respectivas legaciones al rango de embajadas.

“Desde entonces, las siempre excelentes relaciones diplomáticas entre nuestros dos países han dado lugar al establecimiento de numerosos acuerdos bilaterales en materia de cooperación técnica y científica; intercambio cultural y protección recíproca de las inversiones”, afirmó el embajador de Italia en México, Felice Scauso. En entrevista para Protocolo, el diplomático resaltó que las raíces latinas de los italianos hacen de México un país con el que Italia comparte una “importante comunión” de valores culturales, sociales y religiosos.

Sinergias para el intercambio comercial

Aunque el intercambio cultural entre Italia y México ocupa un lugar destacado en las relaciones bilaterales, quizás es en el aspecto comercial en el que los resultados de la cooperación entre los dos países son más cuantificables.

En 2006, Italia ocupó el tercer lugar en la lista de socios comerciales de México —en el ámbito de la Unión Europea— y el segundo lugar como exportador europeo hacia nuestro país, con 80 por ciento de bienes intermedios e instrumentales (maquinaria, productos metalúrgicos, químicos, plásticos, aparatos eléctricos) y 20 por ciento de bienes de consumo (ropa y textiles, pieles, zapatos, joyería, muebles y decoración, medicinas y productos agroalimentarios).

De acuerdo con el embajador Scauso, a septiembre de 2006, en México se tenían registradas 905 empresas con inversión italiana (equivalentes a 2.6 por ciento del total de las empresas extranjeras presentes en México). El 80 por ciento de estas empresas cuentan con capital mayoritariamente italiano.

Por su distribución geográfica, se encuentran principalmente en el Distrito Federal y en Chihuahua, San Luis Potosí, Nuevo León, Estado de México, Puebla y Quintana Roo. Los sectores de inversión se concentran particularmente en la producción de maquinaria, productos metálicos y electrónicos, servicios profesionales y técnicos, así como otras industrias manufactureras.

Entre los grandes inversionistas italianos en México destacan empresas como Grupo Techint-Tenaris, Zoppas, Barilla, Brembo, Maccaferri, La Perla y Ermenegildo Zegna.

De forma diversa se encuentran inversiones comerciales como las de Armani, Assicurazioni Generali, Finmeccanica-Augusta-Westland, Calzedonia, Danieli, ENI, Fata, Ferragamo, Ferrero, Fiat-Ferrari, Luxottica, Max Mara, Metecno, Merloni, Pirelli, Saipem, Snam Progetti e Intesa-San Paolo.

Al referirse a las áreas en donde actualmente existen mayores oportunidades de negocios entre ambos países, Felice Scauso destacó los sectores energético, automotor, aeroespacial, salud y farmacéutico, transporte y telecomunicaciones, químico, alimentos y bebidas, así como turismo y ambiente, además de diseño industrial.

El diplomático recomendó impulsar entre los empresarios de ambos países un mayor conocimiento recíproco acerca de las oportunidades de inversión y comercio, promoviendo misiones de empresarios en los sectores de interés y desarrollando mecanismos de colaboración entre las instituciones y empresariales de ambos países dedicadas al comercio exterior.

En este sentido, Felice Scauso reconoció el trabajo realizado en México por la Oficina del Instituto Italiano para el Comercio Exterior y la Cámara de Comercio Italiana en México, “instituciones que trabajan sinérgicamente para favorecer el intercambio
comercial entre nuestros dos países”.

Al ser cuestionado sobre los beneficios obtenidos a partir del Tratado de Libre Comercio entre México y la Unión Europea (TLCUEM), el embajador dijo que este tratado no ha modificado la tendencia de un menor flujo de exportaciones mexicanas hacia Italia.

“Creo que se puede considerar el mercado italiano como un lugar de destino potencial de muchos productos mexicanos, particularmente en lo que se refiere a la exportación de materias primas y productos agrícolas mexicanos.”

Cooperación científica y acercamiento político

En marzo de este año, Italia y México —este último representado por la subsecretaria de Relaciones Exteriores, María de Lourdes Aranda Bezauri— suscribieron en Roma el II Programa Ejecutivo de Cooperación Científica y Tecnológica 2007-2009.

Ese programa establece el intercambio de investigadores en relación con 29 proyectos conjuntos en ciencias básicas (matemática, física y química); ciencias aplicadas (geología, informática, ingeniería, ciencias de los materiales); ciencias agrarias, agroalimentarias y ambientales; energía convencional y renovable, y ciencias biomédicas (medicina, farmacología, biología, biotecnologías, veterinaria).

En materia política y bilateral, el embajador Scauso destacó que durante los últimos años Italia y México han registrado un particular acercamiento en todos los sectores; por ejemplo, en materia política, ambos países comparten puntos de vista y objetivos en el campo multilateral, como lo muestra su cooperación en la reforma del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

También, mencionó, hay convergencia de objetivos en cuanto a las actividades del Consejo de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, al compromiso en la campaña mundial para la abolición de la pena de muerte, así como en la participación activa en la campaña para la universalización de la Corte Penal Internacional.

Turismo cultural
De los más de 200 mil italianos que cada año visitan México, un gran porcentaje son estudiantes y amantes de la arqueología.
En el caso de los turistas mexicanos, éstos tienen como destinos favoritos las ciudades de Roma, Venecia y Florencia, que
tradicionalmente atraen a los visitantes mexicanos interesados en el arte, la historia y los monumentos italianos, los encuentros culturales, la eno-gastronomía y ferias internacionales, como la renombrada Feria de Milán.

En el aspecto cultural, la particular cercanía entre la cultura italiana y la mexicana se manifiesta por la atracción mutua hacia la producción artesanal, la eno-gastronomía, la música, la danza popular y en general hacia todas las formas de expresión folclórica.

“Siempre ha existido una simpatía natural entre nuestra gente, y eso ha favorecido un interés recíproco en conocer nuestros respectivos países, y en compartir tradiciones, música, literatura, tesoros artísticos y, desde luego, en fortalecer lazos comerciales en beneficio mutuo”, enfatizó el diplomático.

Respecto a la difusión del idioma italiano en México, el embajador destacó que más de 25 mil estudiantes asisten a los cursos impartidos en el Instituto Italiano de Cultura; en las Sociedades Dante Alighieri ubicadas en varios estados de la República Mexicana y en los centros de idiomas del sistema escolar y universitario mexicano.

Ello representa “una expresión palpable del gran interés hacia la cultura italiana”, puntualizó.

Italia y México: trabajo conjunto para resolver retos comunes

A punto de cumplir dos años de haber iniciado sus funciones como embajador en México, Felice Scauso dijo sentirse
satisfecho por contribuir al fortalecimiento de las relaciones entre Italia y México y, al mismo tiempo, “por haber conocido un país tan hermoso e interesante, como lo es México.”

Al referirse a los desafíos que encara nuestro país, Felice Scauso apuntó que México tiene que enfrentar y resolver problemas como la pobreza o el narcotráfico. “Estoy seguro que en esos desafíos y en otros, (México) saldrá adelante, como lo ha demostrado hasta ahora con los difíciles retos que se le han
presentado.”

“Espero que a través de esta edición especial de Protocolo, los lectores puedan conocer un poco más sobre Italia y cómo nuestros países pueden trabajar juntos para fortalecer aún más los vínculos que los hermanan y para superar retos comunes”, concluyó.

There has always been a long and well-founded tradition of rapport and friendship between Italy and Mexico. The solid bonds that unite these two countries are reinforced by ever increasing bilateral relations, particularly in the fields of political, economic and cultural cooperation. Although diplomatic ties between Italy and Mexico officially date back to 1872 – when the first Italian consul general and chargé d’affaires was accredited here – it was not until July 1, 1946, after the end of the Second World War, that both nations reestablished two-way relations and elevated their respective diplomatic representative offices to the rank of embassies.

“Since then, the always excellent diplomatic relations between our two countries have given birth to the establishment of numerous bilateral accords in the areas of technical and scientific cooperation, cultural exchange and reciprocal protection of investment interests,” explained Italian Ambassador to Mexico Felice Scauso in a recent interview with Protocolo.
In his interview with Protocolo, the Italian diplomat highlighted the fact that Italy and Mexico share common Latin roots, which paves the way for better mutual understanding and shared cultural, social and
religious values.

Synergies for commercial exchange
Although cultural exchanges between Italy and Mexico occupy an important place in the countries’ bilateral relations, perhaps it is in the commercial arena that two-way cooperation is most notable.

In 2006, Italy ranked in third place among Mexico’s European trade partners, and was the second largest European exporter to our country. About 80 percent of Italy’s total sales to Mexico fall into the category of intermediary goods and instruments (that is, machinery, metallurgic products, chemicals, plastics and electrical apparatuses). The remaining 20 percent include mostly consumer goods, such as clothing, textiles, leather goods, shoes, jewelry, furniture, home décor wares, medicines and food stuffs.

According to figures provided by Ambassador Scauso, as of September 2006, 905 Italian companies had registered capital holdings in Mexico, a number representing 2.6 percent of all foreign firms in the country. About 80 percent of these Italian companies had European majority holdings.

Geographically, most of the Italian companies in Mexico are found in the Federal District and the states of Chihuahua, San Luis Potosí, Nuevo León, the State of México, Puebla and Quintana Roo. The sectors most heavily represented by these Italian firms are those of capital goods, metal products and electronics, professional and technical services and manufacturing industries.

Among some of the largest Italian investors in Mexico are such renowned corporations are Grupo Techint-Tenaris, Zoppas, Barilla, Brembo, Maccaferri, La Perla and Ermenegildo Zegna. Also with notable representations here are Armani, Assicurazioni Generali, Finmeccanica-Augusta-Westland, Calzedonia, Danieli, ENI, Fata, Ferragamo, Ferrero, Fiat-Ferrari, Luxottica, Max Mara, Metecno, Merloni, Pirelli, Saipem, Snam Progetti and Intesa-San Paolo.

Felice Scauso went on to note that there are still several sectors in which Italian companies could significantly increase their business cooperation with Mexican counterparts, particularly in the fields of energy, automotives, aerospace sciences, health and pharmaceuticals, transport and telecommunications, chemicals and food and beverages, as well as in the areas of tourism, environmental protection and industrial design.

The diplomat particularly recommended that impetus should be given by businessmen on both sides of the Atlantic to increase mutual awareness of potential investment and trade opportunities, promoting commercial missions in sectors that are promising to both sides. He also said that mechanisms of bilateral cooperation between institutions and commercial chambers in both countries should focus on increased foreign exchange.

To this end, Felice Scauso said that special recognition should be given to the work realized in Mexico by the Office of the Italian Institute for Foreign Trade and the Italian Chamber of Commerce in Mexico. He said that these institutions “work in synergy with one another to foster commercial exchange between our two countries.”

Asked about the benefits gained from the free trade agreement between Mexico and the European Union, the ambassador said that this treaty has not significantly changed the tendency towards a decreased flow of Mexican exports to Italy.
“I think that the Italian marketplace could potentially be a major destination for Mexican goods, particularly for the export of raw materials and agricultural products,” he said.

Scientific cooperation and political rapprochement Last March, Italy and Mexico signed in Rome the II Programa Ejecutivo de Cooperación Científica y Tecnológica 2007-2009, a bilateral accord aimed at promoting two-way scientific and technological cooperation. On behalf of the Mexican government, that agreement was signed by Mexican Undersecretary of Foreign Relations María de Lourdes Aranda Bezauri.

The program established a formal framework for the interchange of technicians and researchers to work together on 29 specific scientific projects (regarding mathematics, physics and chemistry), applied sciences (in the areas of geology, information
technologies, engineering and material sciences), agrarian science, environmental science, conventional and renewable energy and biomedical sciences (including medicine, pharmaceuticals, biology, biotechnology and veterinarian medicine).

On the political front, Ambassador Scauso pointed out that in recent years, Italy and Mexico have demonstrated a common position on numerous subjects. In multinational forums, for example, they have shared a common perspective on such topics are United Nations Security Council reform.

He also mentioned that Mexico and Italy share a common perspective in terms of activities realized by the United Nations Commission on Human Rights, the global campaign for the abolition of capital punishment and the campaign for the universal acceptance of the International Criminal Court (ICC).
Cultural tourism

Of the more than 200,000 Italians who visit Mexico each year, a large percentage is students and archeology aficionados.

As for Mexican tourists to Italy, the favorite destinations are Rome, Venice and Florence, which draw visitors interested in art, history and Italian monuments. Other attractions for Mexican tourists are Italy’s wines, food and international fairs, such as the renowned Feria de Milán.

In the cultural arena, the close similarities between Italy and Mexico are manifested by a mutual attraction for the production of
handicrafts, fine wines and gastronomy, music, popular dance and all other forms of traditional folkloric arts.

“There has always been a natural friendship and closeness between our two people,” Scauso said. “And that friendship has encouraged a mutual interest in knowing more about each others respective countries. It has fostered a sharing of traditions, music, literature, artistic treasures and, of course, commercial ties that benefit both of us.”

Regarding the growing diffusion of the Italian language in Mexico, the ambassador pointed to the more than 25,000 students who attend classes each year at the Italian Institute of Culture, the various Dante Alighieri Societies across the republic and the diverse Italian language programs in schools and universities nationwide. “This is a very palpable expression of the interest that exists here in Italian culture,” Scauso said.

Italy and Mexico:
Working together to reach common goals
As he neared the end of his second year as head of the Italian chancellery in Mexico, Ambassador Felice Scauso said he felt satisfied with his contribution to the strengthening of bilateral relations between Italy and Mexico. At the same time, he said, he was grateful for the opportunity “to get to know a country that is as beautiful and interesting as Mexico.”

Referring to the challenges that our nation still faces, Felice Scauso noted that Mexico must now confront and solve grave problems such as extreme poverty and drug trafficking. “I am certain Mexico will meet these and other challenges successfully, as it has met the difficulties it has faced in the past,” he said.

“I hope that through this special edition of Protocolo, your readers can come to know a little more about Italy and how our two countries can work together to strengthen even more our close ties of friendship and to accomplish our common goals.”