La aeronave TP01, que cuenta con zona lounge, oficina y recámara, además de los asientos, a más de un año de que se puso a la venta y al no haber comprador, el director de Banobras detalló tres estrategias entre las que se incluye un plan de renta
Luis Felipe Hernández Beltrán
Ciudad de México, 15 de enero de 2020.— Durante la tradicional conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador se exhibieron las fotografías de cómo es por dentro el avión presidencial TP01 “José María Morelos y Pavón” adquirido por 212 millones de dólares a finales de la administración del gobierno del presidente Felipe Calderón Hinojosa, que, posteriormente, utilizó el presidente Enrique Peña Nieto durante su sexenio y que, el actual presidente Andrés Manuel López Obrador decidió ponerlo a la venta en 130 millones de dólares, sin que, hasta el momento, haya sido vendido.
Jorge Mendoza Sánchez, director del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), dijo en el matutino ejercicio periodístico, que a pesar que hubo varios interesados pero no se logró concretar su venta, la aeronave, que actualmente está aparcada en el Aeropuerto de Victoville, California, Estados Unidos, volverá a territorio mexicano para ser resguardada por la Fuerza Aérea Mexicana, ser exhibida con otros aviones que están a la venta, y con ello explorar tres alternativas para su comercialización:
“La primera, continuaremos con los esfuerzos para llevar a buen puerto la venta, ya sea para un comprador único, dos, la venta en copropiedad, es decir, que dos o más personas puedan asociarse para adquirir esta aeronave, y la tercera alternativa es considerar la renta del activo y con eso tratar de dar una solución a esta iniciativa del presidente”, comentó el funcionario.
En una de las fotografías exhibidas del interior del polémico vehículo aéreo, destacan más de 37 asientos acolchonados y reclinables para pasajeros, algunos de ellos con pantalla personal y equipados con almohadas y cobijas.
En otra imagen, resalta una zona lounge-comedor con mesas de madera y accesorios como vajilla y copas de cristal.
Una tercera fotografía destaca una oficina amueblada con asiento y escritorio y un sillón amplio para visitantes, además de una computadora personal y artículos tradicionales de oficina.
Finalmente, una última foto de un camarote-recámara, donde sobresale una cama matrimonial.
En la información enviada a los medios de comunicación, no se detallan tipo de materiales, antigüedad y costo de los aparatos electrónicos, muebles y objetos que aparecen en las imágenes.
También se exhibe la cabina de pilotos.
