Entrevista con el general Genaro Fausto Lozano Espinoza, director general de la Industria Militar
La historia de las fuerzas armadas estaría incompleta si no se dedica un capítulo a las armas que utilizan los militares en el Ejército. Y más cuando la Industria Militar es una organización productiva dentro de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que este 2016 cumple 100 años de haber sido creada por el entonces jefe del Ejército Constitucionalista, Venustiano Carranza, quien durante la Revolución Mexicana se percató que las facciones en pugna adquirían todo su material bélico en el extranjero, ante lo cual acuñó la siguiente frase: “Hay que producir nuestras armas y municiones si no queremos que nuestras decisiones en política interior las tomen aquellos que nos las proporcionan”; a partir de ese momento, se giró un decreto mediante el cual se aglutinó a lo que es hoy la Industria Militar.
En entrevista exclusiva con Protocolo, el general de división diplomado del Estado Mayor, Genaro Fausto Lozano Espinoza, director general de la Industria Militar, aseguró que el área que dirige es un recinto de ciencia, tecnología, técnica y arte, el cual da un enfoque muy importante a la investigación y desarrollo; basado en el impulso que el general secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, ha pedido que se dé a estas materias.
“En la Industria Militar producimos todo el armamento, material bélico, municiones y vehículos militares para las necesidades del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; también se ensambla y se da mantenimiento a equipos industriales”, señaló.
El general Genaro Lozano explicó que hoy en día, en las 18 fábricas que comprende la Industria Militar, se crean productos que son fabricados con base en tecnología mexicana y que existen 32 registros ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
Tecnología mexicana
Algunas de las armas que se fabrican en la Industria Militar, se deben a los avances en la investigación y desarrollo para producir las armas y municiones, entre ellas se encuentran: carabinas, pistolas, ametralladoras, aditamentos lanzagranadas de 40 milímetros y, recientemente, el fúsil G3 y el GX05, hechos con tecnología mexicana.
En el caso de los automóviles especiales para el Ejército, el director general de la Industria Militar destacó que se cuenta con tres prototipos de vehículos blindados hechos con tecnología propia. Y subrayó que todo pasa por un estricto control de calidad que permite garantizar productos competitivos a escala mundial. “Estamos en busca de disminuir, en la mayor medida, cualquier dependencia tecnológica del exterior”, recalcó.
Personal altamente calificado
Debido a que el material que se maneja dentro de la Industria Militar exige de gran cuidado y seguridad, el personal que labora en las distintas áreas está altamente calificado, la mayoría son ingenieros industriales, químicos, mecánicos, eléctricos, todos egresados de la Escuela Militar de Ingenieros.
Asimismo, el general Lozano Espinoza comentó que también se recluta a civiles bajo un proceso muy estricto de selección; a todos se les capacita en el Centro de Capacitación de la Industria Militar por medio de cursos —que no solamente sirven para el personal de la Industria Militar, sino para todas las unidades y dependencias del Ejército que tienen alguna injerencia con el mantenimiento industrial o con las prácticas de mantenimiento de armamento o de vehículos—; y una vez que se presentan mayores oportunidades se les promueve para que hagan diplomados, especialidades, maestrías y doctorados, por lo tanto el personal que allí labora tiene un alto nivel académico.
Generación de recursos
El director general de la Industria Militar remarcó que el objetivo de la institución a su cargo es ser autosuficientes para la defensa nacional y, en una segunda fase, aspiran a convertirse en una nueva fuente de generación de recursos para el Estado mexicano a través de la venta de armamento lícito.
Explicó que hay países en el mundo como Estados Unidos, China, Rusia, Israel, Francia, Alemania, Italia, República Checa, Brasil, Colombia, Argentina y Chile, que han hecho de la industria militar un negocio para fortalecer sus respectivas economías y que en México por medio de la institución a su cargo se desarrolla un proceso de modernización del armamento del Ejército. “Estamos produciendo para migrar… y producir nuestra propia tecnología y armamento…”.
Uso de armas, gran responsabilidad
El general Lozano envió un mensaje a los jóvenes a quienes dijo que el ser militar implica tener vocación de servicio, conducirse con lealtad y honor. Subrayó que el mundo militar está lleno de oportunidades que la institución ha generado a lo largo de muchos años y que hoy están consolidadas; y dependerá de cada individuo el generar su propio proyecto de vida y alcanzar las máximas jerarquías en cada escalafón al que pertenezca. “No hay nada más satisfactorio que servirle al país y a los mexicanos quienes merecen un México seguro, tranquilo y para el cual esta gran institución trabaja todos los días.”
Y concluyó con una reflexión: “El uso de un arma requiere de una enorme responsabilidad, no es solamente tenerla, poseerla, adquirirla, sino que implica una preparación, un razonamiento lógico, un orden psicológico adecuado. Entender que el arma por sí sola no es peligrosa, un mal manejo de ella es lo que la hace peligrosa y entonces, hay que tener conciencia plena y una enorme responsabilidad de todos aquellos que tienen un arma en su poder.”
Revista Protocolo
