Marco Antonio Regil y Mauricio González se unen a la iniciativa de ley de la organización mexicana Come ConCiencia que busca contribuir a erradicar la obesidad infantil en México
Revista Protocolo
Ciudad de México, 22 de septiembre de 2020.— De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en México, al menos uno de cada 20 niños menores de cinco años padece obesidad y esto no solo representa un problema de salud pública sino que también infiere en un problema económico nacional, ya que la mayor parte de los gastos en salud se destinan a tratar enfermedades que pueden prevenirse con cambios básicos en la alimentación de los infantes.
Actualmente existen en México cerca de cuatro millones (3.95 millones) de niños de entre cinco y nueve años con sobrepeso u obesidad, los cuales están propensos a desarrollar enfermedades crónicas y tener una menor calidad de vida.
La Secretaría de Salud (SSa), en México, indica que 14 mil 966 menores de edad, de recién nacidos a 15 años, han dado positivo al covid-19, de todos estos, el 4 por ciento que ha fallecido fue por problemas previos en su salud, relacionados con sobrepeso y obesidad.
La organización mexicana Come ConCiencia, representada por su directora Celma Ochoa, ha presentado en la Cámara de Diputados la iniciativa “Infancia Sin Chatarra” donde se establecen las pautas para cambiar la realidad de miles de chiquillos en México a través de una regulación que impide el consumo de productos procesados con conservadores dañinos, bebidas azucaradas, alimentos con alto contenido de calorías, grasas saturadas y trans.
A dicha iniciativa se han unido el conductor de televisión Marco Antonio Regil, Mauricio González Arias, del Hospital Metropolitano de Nutrición en Nueva York, y los legisladores federales Ana Patricia Peralta, Nayeli Fernández y Arturo Escobar.
La iniciativa busca contribuir al decrecimiento de los problemas de salud que genera el consumo de alimentos y bebidas no alcohólicas que excedan los límites máximos de contenido energético, azúcares añadidos, grasas saturadas, sodio que obstaculizan la creación de buenos hábitos alimenticios desde temprana edad.
Lo anterior se logrará, principalmente, reformando y agregando artículos a la Ley General de Salud, la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, y la Ley General de Educación, todo con el propósito principal de preservar la salud de los niños mexicanos.
