El jet lag, también conocido como síndrome transoceánico, es un desequilibrio producido entre el reloj interno de una persona y el huso horario donde se encuentra
Revista Protocolo
Ciudad de México, 8 de noviembre de 2019.— ¡Aceptémoslo!, cada que hay un cambio de horario, cuesta trabajo permanecer con la rutina y ser eficientes en todos los aspectos debido a la descompensación que tenemos. Expertos dicen que el cambio de horario tiene efectos en nosotros similares a los del jet lag; es decir, se tiene sueño en pleno día y por las noches se permanece en un estado de vigilia.
El jet lag es común entre viajeros que cruzan distintas regiones horarias, por lo que síntomas como fatiga, alteración del sueño, retención de líquidos, problemas digestivos, irritabilidad, apatía y dislalia (problemas al hablar), son comunes. Además, la disritmia circadiana se hace presente, por lo que descansar a plenitud resulta un reto.
Es un hecho que, si se prepara el cuerpo antes y después de viajar, se puede aminorar los efectos, por lo que se recomienda practicar ejercicio y seguir una dieta saludable, mantenerse hidratado y evitar la ingesta de alcohol y cafeína.
Además, antes de tomar medicamento para dormir, es importante considerar terapias alternativas como la cabina de crioterapia. Según Javier Sors, director deCryoMx, ubicado en la planta baja de Manzanillo 100, colonia Roma de la Ciudad de México, la crioterapia, además de ayudar a eliminar dolores provocados por pasar horas sentado en un avión, hace entrar más fácil a la fase REM del sueño, la cual ayuda a dormir de manera profunda obteniendo un descanso efectivo y aminorando los efectos del jet lag.
El hecho de que con la crioterapia se logre entrar en la fase REM de manera fácil, no implica que uno vaya a dormir más horas, sino que al dormir, se hará de manera profunda descansando mejor. Esto se debe a que el cerebro libera serotonina en sangre, actuando como reloj biológico y favoreciendo el sueño por la noche.
¿Cómo es el proceso?
Se ingresa a un cuarto donde el paciente se quita todo lo que sea metálico y esté en contacto con la piel, incluyendo la ropa interior. Se le da una bata, botas y guantes, con los que se ingresa a la cabina.
Una vez dentro, los primeros diez segundos servirán para climatizar, posteriormente se estará a 180 grados por tres minutos en vapor de nitrógeno líquido, con la intención de regular el metabolismo, optimizar los procesos celulares y regular el patrón de sueño.
Además, la cabina de CryoMx favorece la eliminación de toxinas a través de la orina, por lo que se deja de acumular líquidos, beneficia la acción de la insulina mejorando los niveles de azúcar simple en sangre y lo mejor, a partir del minuto y medio de aplicación, se quema la grasa, por lo que se quema hasta 800 calorías en cada sesión.
