Esta enfermedad se caracteriza por la acumulación de grasa en el hígado (esteatosis) e inflamación hepática (esteatohepatitis)
Ante el panorama epidemiológico de la obesidad y el sobrepeso, la Organización Mundial de la Salud estimó que para 2015 habrá aproximadamente dos mil 300 millones de adultos con sobrepeso y más de 700 millones con obesidad en el mundo.
Mientras aumenta el número de personas con obesidad o sobrepeso, el riesgo de tener otras afecciones se incrementa, ya que algunas enfermedades tienen una relación directa con esta condición, tal es el caso del hígado graso.
Esta enfermedad se caracteriza por la acumulación de grasa en el hígado (esteatosis) e inflamación hepática (esteatohepatitis), además de que se describe como una afección que no tiene síntomas claros, cuya problemática radica en ser el padecimiento hepático con más prevalencia.
Puede manifestarse con síntomas como dispepsias (digestiones gástricas o intestinales dificultosas), trastornos digestivos, dolor o pesadez en el área hepática. Aunque muchas enfermedades del hígado se relacionan con la ingesta de alcohol, el hígado graso es ocasionado en un 90 por ciento por un exceso de peso.
En tanto, existen dos tipos de esta enfermedad, la primera se conoce como enfermedad hepática grasa alcohólica, la cual tiene una relación directa con el consumo de alcohol, y la segunda es el hígado graso no alcohólico, que en su mayoría es causado por la obesidad.
“La obesidad, es el factor de riesgo principal en esta enfermedad, ya que puede generar hígado graso por una dieta alta en grasas, hidratos de carbono simples, alimentos con alto contenido en azúcares refinados y baja en proteínas”, comentó el doctor Raúl Morín, fundador de la Asociación Mexicana para el Estudio de la Obesidad.
Con base en esta problemática el laboratorio Medix lanzó al mercado un medicamento que protege al hígado y busca evitar la aparición de enfermedades como hepatitis agudas y crónicas, esteatosis no alcohólica, alcohólica, esteatohepatitis y cirrosis.
Se trata de un suplemento alimenticio para el tratamiento de pacientes con hígado graso. Su combinación de siliphos, selenio metionina y ácido alfa lipoico, ayuda a proteger, depurar y regenerar las células de este órgano.
De acuerdo con el especialista, quien también funge como gerente médico del laboratorio, “son muchas las millones de personas en riesgo, por lo cual es necesario poner atención en la salud de su órgano con una dieta adecuada y preguntando a su médico por los estudios clínicos que definan el diagnóstico, así como también la terapia integral que le permita tener una mejor calidad de vida y un curso del padecimiento más controlado”, concluyó. (Agencia ID)
Revista Protocolo
