Mala calidad en leche materna y predisposición a enfermedades metabólicas en el bebé, entre los hallazgos del INCMN
Durante el embarazo los especialistas recomiendan una alimentación adecuada para cuidar la salud de la madre y el bebé. Al respecto un estudio del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, comprobaron los efectos de una mala alimentación en la leche materna.
La doctora Elena Zambrano González, titular del proyecto, explicó que tanto la desnutrición como la obesidad materna repercuten directamente en la calidad de la leche, ocasionando que el bebe esté predispuesto a enfermedades metabólicas o problemas de aprendizaje.
Para la investigación, se utilizaron modelos animales (ratas de laboratorio) donde se alimentó a un primer grupo con dieta alta en grasa, mientras que otro grupo se indujo a desnutrición. En ambos casos las crías fueron nutridas con dieta control.
En el modelo de desnutrición se halló que la leche materna de las ratas desnutridas, a pesar de tener la misma composición en proteínas, la cantidad de ácidos grasos poliinsaturados era menor.
Esto trajo como resultado que las crías tuvieran mayores problemas de aprendizaje y memoria, ya que durante la gestación su cerebro no tuvo los nutrientes necesarios y, aunque en la vida posnatal fueron bien alimentados, ya no se pudo revertir este daño.
Otro hallazgo encontrado con el mismo modelo de desnutrición fue que las crías de madres desnutridas, a pesar de ser alimentadas normalmente, con el tiempo desarrollan problemas de sobrepeso y resistencia a la insulina, problema que también presentó su descendencia.
Destacó que estos resultados son de suma importancia pues comprueban el paso transgeneracional del sobrepeso y la resistencia a la insulina por la desnutrición de la abuela.
En el modelo de obesidad materna los resultados demostraron que la descendencia, a pesar de ser alimentada con dieta control, tuvo sobrepeso, mayor acumulación de grasa y resistencia a la insulina. No fue así con un grupo de roedores cuyas madres obesas fueron sometidas a una nutrición adecuada antes del embarazo, en donde se previnieron algunos efectos negativos en las crías por la obesidad materna.
De acuerdo con la doctora Zambrano, el estudio demostró la importancia de la intervención nutricia previa al embarazo para garantizar la salud de la descendencia y por ende de las futuras generaciones.
Indicó que las mujeres que deseen embarazarse deben cuidar su dieta y hacer ejercicio para no tener sobrepeso o desnutrición. De esta manera evitarán en sus hijos la predisposición a la obesidad y padecer diabetes o hipertensión. (Agencia ID)
Revista Protocolo
