Texto: Luis Felipe Hernández Beltrán con información de la Agencia EFE
Aunque parecía histórico el que el ejército de Estados Unidos participara por primera vez en un desfile del 4 de julio, este suceso fue opacado por el discurso del presidente Donald Trump.
“Vamos a ir otra vez a la Luna pronto y plantaremos la bandera de Estados Unidos en Marte pronto. Para Estados Unidos no hay nada imposible”, dijo el mandatario ante miles de estadounidenses, durante su discurso en Washington, desde un templete instalado en el monumento al expresidente Abraham Lincoln con motivo del 243 aniversario de la Declaración de independencia de EEUU.
Trump aprovechó para elogiar al ingeniero aeroespacial, aún con vida, Eugene F. Gene Kranz, quien en 1969 dirigió la histórica misión espacial del Apolo 11, que llevó a los astronautas Neil Armstrong, Aldin “Buzz” Aldrin y Michael Collins a la Luna.
De aquella odisea, se recuerda el aterrizaje del Apolo 11 en la superficie lunar el 20 de julio de 1969, y al día siguiente, 21 de julio, a los astronautas Armstrong y Aldrin haciendo una caminata por el satélite natural terrestre plantando la bandera estadounidense.
El discurso del también empresario se suma a las declaraciones del vicepresidente Mike Pence que emitió en marzo de 2019 en una gira de trabajo por el Centro Espacial de Cohetes de Huntsville, Alabama: “La primera mujer y el próximo hombre que vuelvan a pisar el suelo de la Luna serán ciudadanos estadounidenses lanzados por cohetes estadounidenses y desde suelo estadounidense”, dijo en aquel entonces, sin precisar la fecha de cuándo se realizaría esto.
Aunque faltan 15 días para la conmemoración de los 50 años de la llegada del hombre a la Luna, aún se desconoce lo que organizará el gobierno estadounidense para recordar aquel histórico suceso.