El Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México, desarrolló este nuevo sistema que disminuye tiempos y costos
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| César Madariaga es uno de los estudiantes que participan en este proyecto |
Es común que clínicas y hospitales cuenten por lo menos con dos incubadoras listas para utilizarse como medida precautoria, pues a estos instrumentos les toma entre 45 y 90 minutos alcanzar la temperatura que requiere el tratamiento de un recién nacido prematuro, lo que implica un alto consumo de energía.
Como una opción, el Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México, desarrolló un Sistema de Turbo Calentamiento para Incubadora de Infantes que permite llegar a la temperatura deseada en menor tiempo.
La tecnología propone reducir el tiempo necesario para que la incubadora se caliente al inyectar calor adicional al aparato mediante flujo de aire. En laboratorio se hizo con un tipo de secadoras para el cabello y se determinó que, una vez obtenida la temperatura de control (37 grados), se desconecta el turbocalentamiento y se deja el sistema de fábrica que contiene la incubadora.
Como el contenedor ya se encuentra en la temperatura deseada, se deja el control automático, explicó el maestro en ciencias y coautor del diseño Rafael San Vicente Cisneros, con lo que se reduce el tiempo de calentamiento de 15 a 20 minutos. “De manera que si se presenta una emergencia se puede tener lista la incubadora con la opción del turbocalentamiento.”
De hecho, esta técnica en la etapa de investigación se implementó inyectando aire caliente en el capacete (pieza que cubre el aparato) y el gabinete, por lo que se propone su incorporación de manera alterna o en paralelo al sistema que tiene la incubadora desde su fabricación.
La idea principal, explicó el investigador, es que cuando pongan en funcionamiento el aparato, inicie el calentamiento con ambos sistemas, una vez que llega a 35 o 36 grados se desconecta la tecnología alterna y mantiene aquella incluida en la incubadora.
Como parte de la investigación, el Tecnológico de Monterrey realizó un comparativo entre el proceso de calentamiento normal y su sistema. Sobre la primera comprobaron que durante un promedio de 24 horas encendida se emplean 5.12 kilovatios por hora, cuyo costo es de 3.41 pesos; en cambio con su propuesta en ese mismo lapso sólo se usa 0.341 kilovatios hora, y el gasto es de 0.22 pesos.
Las pruebas fueron realizadas en aparatos de características similares a las empleadas en instancias de seguridad social nacionales, las cuales alcanzaban la temperatura ideal en menos de 20 minutos.
El investigador del Tecnológico de Monterrey recalcó que no es necesario rediseñar en su fabricación las incubadoras, ya que el sistema puede implementarse de manera adicional. “Lo único que requiere es una fuente de aire caliente, y ésta puede obtenerse con cualquier tipo de pistolas generadoras de esa corriente o calefactores tipo casero que pueden adaptarse en los cajones de las incubadoras”, detalló.
Aunque la propuesta original del turbocalentamiento es de los profesores Rafael San Vicente Cisneros y Enrique Chong Quero, quienes desarrollaron la técnica a partir de un algoritmo de control, la idea fue retomada y puesta en marcha gracias a un proyecto estudiantil de los alumnos Elena Barajas, César Madariaga y Araceli Rodríguez, del Tecnológico de Monterrey.
Este desarrollo participó en el Panamerican Health Care Exchanges 2009, llevado a cabo en el Instituto Nacional de Rehabilitación en la Ciudad de México, además de contar con publicaciones en revistas científicas. (Agencia ID)
Revista Protocolo
