Enrique Dussel sostiene que México deberá aprender a negociar con China para no convertirse solamente en un proveedor de materias primas
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| Enrique Dussel |
En una entrevista con la agencia Xinhua, el coordinador del Centro de Estudios China-México de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Dussel, destacó la potencialidad que tienen ambas naciones para intensificar su relación bilateral.
Indicó que a casi diez años de que China se adhirió a la Organización Mundial del Comercio (OMC), el país asiático se convirtió en uno de los principales socios comerciales no sólo de México sino de toda la región latinoamericana. Dussel consideró que la relación China-México tiene mucho potencial, pero en un sentido realista, también tiene muchos “claroscuros” que deberán corregirse. Señaló que en 2010 la balanza comercial entre ambas naciones fue totalmente favorable a China con una proporción de 11 a uno.
El economista recomienda que los gobiernos de ambas naciones deben trabajar más en el ámbito institucional, apoyando las mesas de trabajo y reuniones entre funcionarios del más alto nivel posible. Dussel señaló que están en la mesa, desde hace ya varios años, algunos temas pendientes como el fomento al turismo, las medidas para combatir el comercio de productos ilegales, la triangulación comercial, migración y facilitación de visas para ciudadanos chinos, entre otros.
Agregó que tanto México como los países de la región latinoamericana carecen de una agenda de trabajo a corto, mediano y largo plazos con el gigante asiático, algo que China sí tiene muy claro. La prioridad de China en la región, es buscar una relación armónica a largo plazo, destacando la relación comercial y las inversiones, así como garantizar la obtención de materias primas y alimentos.
Según estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la inversión extranjera directa en la región será encabezada por China, con alrededor de 25 mil millones de dólares entre 2010 y 2011.
México, como parte del bloque de economías latinoamericanas, deberá aprender a negociar con China para no convertirse solamente en un proveedor de materias primas, por lo que deberá invitar a las firmas chinas a invertir en procesos industriales más sofisticados, para la manufactura de productos de mayor valor agregado. Fuente: Xinhua.News. 29-08-11.
Revista Protocolo
