Tras dos años de trabajo diplomático en México, Daniel Chuburu se va a la India a hacerse cargo de la Embajada de Argentina en aquel país asiático
Texto y fotografías: Luis Felipe Hernández Beltrán para la revista Protocolo Copyright©
Adiós muchachos, compañeros de mi vida,
barra querida de aquellos tiempos,
me toca a mí hoy emprender la retirada,
debo alejarme de mi buena muchachada…
Suenan las líneas del célebre tango que en 1927 escribiera el distinguido poeta César Felipe Vedani, cuya música es de Julio César Sanders y que un año después lo inmortalizara la voz del gran Carlos Gardel. Todos argentinos.
Aunque aquella composición refiere a una despedida de vida de un ser enfermo que está a punto de morir, un sentimiento similar se vivió recientemente en la Embajada de Argentina en México; aunque sin lágrimas pero sí con muchas sonrisas, el embajador Daniel Chuburu se despidió de colaboradores y amigos que hizo en nuestro país en dos años de trabajo, pues continuará con su labor diplomática, representando a su nación, pero ahora en la India.
Bocadillos y bebidas, fue lo que ofreció el embajador saliente a poco más de 50 asistentes quienes le expresaron buenos deseos y desde luego, peticiones para que regrese pronto, aunque varios diplomáticos aseguraron que por su trabajo, seguramente pronto se volverían a ver en cualquier otro lugar del mundo.
Simpático, de buen humor, caballeroso, y hasta “buen charlista”, fueron los distintos calificativos que se utilizaron para definir a Daniel Chuburu, a lo que él correspondía con abrazos y dedicaba palabras elogiando el trabajo de quien se le acercaba a despedirse personalmente.
Durante la convivencia, no hubo palabras de despedida, ni ningún acto protocolario.
Se espera que en los próximos días, se dé a conocer el nombre del nuevo embajador de Argentina en México.
Mientras tanto: “¡Adiós muchacho Chuburu!, ¡En México se le espera con los brazos abiertos!