Desde hace más de 500 años, las perlas multicolores tahitianas han sido símbolo de valor excepcional y rareza única, características por las que se han ganado el nombre de «reinas de las perlas», y por la fascinación que han ejercido sobre la nobleza, también han sido bautizadas como «las perlas de las reinas».
Estas hermosas gemas, producidas por la ostra Pinctada margaritifera, son originarias de la Polinesia francesa, donde hace muchos años eran recolectadas por nativos del archipiélago. Hoy, las perlas se cultivan en cooperativas o granjas privadas como la empresa Perlas de Tahití.
Las perlas más hermosas y solicitadas son las perfectamente redondas, las denominadas «gota» y las «barrocas». Debido a su rareza, una perla negra puede costar entre diez y cien veces más que una perla blanca. Sin duda, un regalo excepcional para una ocasión especial.
